EL CAIRO, EGI.- Al menos 39 civiles, entre ellos 12 menores, murieron, hasta el cierre de esta edición, por una explosión que provocó el desplome de un edificio en la provincia de Idleb, una zona controlada por rebeldes sirios cerca de la frontera turca, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. 

La explosión ocurrió en un almacén de municiones de un traficante de armas ubicado en la planta baja de un edificio habitacional en la localidad de Sarmada, en el norte de esa provincia del noroeste de Siria.

La mayoría de los residentes en el edificio eran desplazados que procedían de la provincia de Homs.

El número de muertos puede aumentar porque, al cierre de esta edición, todavía había personas atrapadas bajo los escombros y algunos heridos fueron reportados como graves.

La ONG agregó que, además de las víctimas civiles, perdieron la vida tres miembros del Organismo de Liberación del Levante (coalición armada creada en torno a la antigua rama de Al Qaeda en Siria) que trabajaban en la oficina económica del grupo radical.

El vocero de la Defensa Civil siria, Mayed Jalaf, señaló que el edificio tenía cinco plantas y se desplomó por completo por la explosión, cuyas causas se desconocen.

La provincia de Idleb es el último refugio de la oposición armada siria y el lugar adonde se han dirigido combatientes y civiles desde otras regiones conquistadas por las tropas leales al presidente, Bachar al-Ásad. 

DATOS
39 muertos han sido sacados entre los escombros; podría haber más.

Localizan cuerpos. Varios cadáveres han sido sacados entre los escombros; la mayoría de los inquilinos eran desplazados.