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Escándalos y polémicas en torno al Premio Nobel de Literatura
El Premio Nobel de Literatura se ha entregado desde 1901 a 114 personas. Pero en varias ocasiones ha provocado polémicas:
RENUNCIAS (IMPOSIBLES): Cuando Irán impuso en 1989 su fetua islámica contra Salman Rushdie -un decreto religioso de amenaza de muerte-, la Academia Sueca no se posicionó políticamente. Tres miembros proclamaron su renuncia como protesta, algo que los estatutos no permitían entonces. Por lo tanto sus puestos en la institución quedaron vacantes, en dos de los casos hasta que sus ocupantes legítimos fallecieron.
INTERRUPCIONES: Hasta en siete ocasiones se ha suspendido el Premio Nobel de Literatura: 1914, 1918, 1935 y de 1940 hasta 1943, en ambos casos por las dos Guerras Mundiales.
RETRASOS: Los estatutos de la Fundación del Nobel permiten aplazar la concesión del premio hasta el año siguiente y entonces entregar dos. "Si ninguno de los trabajos tomados en cuenta se considera de la importancia indicada en el primer párrafo, la cuantía del premio se reservará para el año siguiente. Si incluso entonces no se puede entregar el premio, la cantidad será añadida a los fondos de la Fundación", indican los estatutos.
La Academia Sueca ha necesitado hacer esto en siete ocasiones. Por ejemplo, el irlandés George Bernard Shaw recibió su premio de 1925 en 1926.
PRIMER RECHAZO: En la historia del Nobel de Literatura dos galardonados no han aceptado el premio. Sin embargo, el primero, en 1958, no lo hizo de forma voluntaria: el escritor soviético Boris Pasternak ("Doctor Zhivago") tuvo que renunciar al Nobel presionado por su Gobierno. Alrededor de 29 años después de su muerte, su hijo aceptó el premio en su nombre en 1989.
SEGUNDO RECHAZO: El francés Jean-Paul Sartre rechazó el Nobel de Literatura en 1964 de forma voluntaria y explicó orgullosamente: "Todo premio te hace dependiente". No obstante, esto no le impidió que once años después preguntara discretamente al Comité del Nobel si era posible recibir la dotación de 273,000 coronas suecas. La petición fue denegada. George Bernard Shaw también dijo en un primer momento que no quería recibir el galardón en 1926, pero después cambió de opinión.
POLÉMICAS Y SORPRENDENTES: Así son casi siempre las decisiones de la Academia Sueca, pero en pocas ocasiones tanto como en 2016, cuando decidió galardonar al cantautor Bob Dylan. Muchos no consideran que sus letras sean literatura y para colmo el propio Dylan no se lo puso fácil a la Academia. Primero no se pronunció para indicar si aceptaba el premio o no. Después, no se presentó en la entrega del galardón y por último envió su discurso justo antes de que concluyera el plazo en un archivo de audio. La por aquel entonces secretaria permanente, Sara Danius, habló de una "aventura Dylan".
CRÍTICAS: En 1997 se criticó duramente al galardonado, el dramaturgo italiano Dario Fo, al que algunos consideraron un bufón. Fo respondió con su discurso, que tituló "Contra jugulatores obloquentes" y que fue muy aplaudido.