El conservar una relación amistosa con la expareja, para muchos puede ser señal de sensatez, sin embargo algunos psicólogos aseguran que esto realmente se trata de un problema de psicopatía y que la mayoría de los casos esconde otras razones.

Cuando se concluye con una relación amorosa, la mayoría de las personas optan por distanciarte un tiempo o toda la vida dependiendo de tres cosas principalmente: 1) El tiempo que duró la relación, 2) Por la forma en que se terminó y 3) Las razones del rompimiento.

Sin embargo cuando se trata de un divorcio las cosas son diferentes y más cuando hay hijos de por medio, porque en tales circunstancias la separación no puede ser total por el lazo que los va a unir para toda su vida. Aunque sigan teniendo comunicación por sus pequeños, no significa que puedan hacerse amigos.

Existen personas que cuando terminan un noviazgo o un divorcio deciden convertirse en sus amigos y todo lo que implica esta palabra: ser sus confidentes, el pedirles consejos, compartir con ellos sus angustias y logros, etc. Cuando esto se da se puede prestar a otras intenciones no muy recomendables.

En muchas ocasiones aunque se asegure que del plano amoroso-apasionado puedes cambiarlo a una ´sana´ amistad muy en el fondo pueden existir otros propósitos, salvo de que nunca se haya llegado a este nivel.

De acuerdo a un estudio dirigido por un grupo de psicólogos de la Universidad de Oakland, el mantener un trato “amistoso” con antiguas parejas demuestra rasgos oscuros de personalidad.

Verdaderas razones para mantener relación con su ex
1. Psicópata
De acuerdo a las conclusiones arrojadas sobre este estudio de los investigadores Justin Mogilski y Lisa Welling, “sugiere que las amistades post-relaciones funcionan de manera similar en la medida que permiten un intercambio continuado de recursos deseables” es decir, estas personas creen que pueden sacar algún beneficio de la otra parte (sexual, ayuda económica, favores, etc.), lo que los convierte en un poco psicópatas.

2. Narcisista
Los individuos con esta característica no suelen dejar tan fácilmente a su expareja y más cuando no han encontrado a otra persona a quien puedan manipular a su manera, por ello valiéndose de lo que conoce de ésta se muestra muy amigable y con las características que no tiene en realidad para volverla a ´conquistar´, esto debido a que “los narcisistas odian fallar o perder, por lo que harán todo lo posible para mantener algún tipo de conexión, ellos tienen dificultades para dejar que se vaya la otra persona”, explica el Dr. Tony Ferretti, experto en narcisismo.

A pesar de lo dicho antes, esto no significa que sea una regla, un estudio realizado por la Universidad de California en los Ángeles, una relación amistosa puede contribuir en muchas ocasiones para un crecimiento personal, pero para que esto suceda se debe ser muy cautelosa, dejar que pase tiempo en que se pueda asimilar esta idea, de preferencia no recordar situaciones incómodas y poner reglas para que nunca se pase esa línea, que la mayoría de los casos suele ser demasiado delgada y peligrosa.