Ciudad de México. Hay muchas formas de aumentar la inteligencia de los hijos, y una de ellas comienza antes de que éstos nazcan.

Un nuevo estudio de investigadores en Londres ha determinado que los bebés cuyas madres están en su tercera década son más saludables e inteligentes que los hijos de mujeres que tienen veintitantos años en el momento del parto y que los bebés cuyas madres están en su cuarta década al dar a luz.

En el marco del Millennium Cohort Study, los investigadores analizaron los antecedentes de más de 18.000 niños británicos y estudiaron el impacto de la edad de sus respectivas madres en su bienestar e inteligencia. Determinaron que los niños que tenían el nivel cognitivo más alto eran aquellos cuyas madres tenían treinta y tantos años en el momento del parto.

Las razones son varias, y la mayor parte se relaciona con el nivel económico y educativo de una mujer cuando da a luz, informó The Independent.

"Es probable, por ejemplo, que las mujeres que son madres por primera vez en su tercera década de vida, tengan un mayor nivel de educación, una forma de vida más saludable, que busquen atención prenatal antes y que hayan planeado tener un hijo", dijo la investigadora Alice Goisis, según The Independent.

También es menos probable que esas madres de más edad fumen, además de ser más probable que amamanten y lean a sus hijos, todo lo cual contribuye a un mayor desarrollo de la inteligencia de un niño, agregó The Independent.

El estudio se realizó en momentos en que la edad promedio en que las mujeres tienen hijos es de veintiséis años, señaló Business Insider. En términos generales, el promedio de edad a la cual las mujeres son madres por primera vez va en aumento, dado que muchas mujeres esperan hasta su tercera o cuarta década para tener un primer hijo. En realidad, las mujeres que tienen hijos en la adolescencia o a los veintitantos años nunca fueron tan pocas, informó Business Insider.

"Si una mujer tiene que elegir entre hacer una carrera y formar una familia en lugar de hacer ambas cosas al mismo tiempo, se ha vuelto más probable que se postergue la maternidad", agregó Business Insider.

Por su parte, el Pew Research Center dio a conocer resultados similares en una encuesta de 2014, que determinó que muchas mujeres de nivel educativo alto postergan la maternidad para desarrollar su carrera.

He aquí los resultados http://www.pewsocialtrends.org/files/2015/01/ST_2015-01-14_women-leadership-0-03.png

Muchos padres y especialistas coinciden en que esperar tiene sus desventajas, sobre todo porque aumentan los riesgos de infertilidad, lo que hace menos probable que esas personas tengan hijos, informó Business Insider. Los expertos también dicen que quienes esperan hasta su tercera o cuarta década suelen tener menos energía, lo cual les hace más difícil sostener la vida familiar.

"La declinación de la fertilidad que conlleva la edad, así como la mayor probabilidad de abortos espontáneos y de complicaciones en el embarazo, significa que esperar para tener hijos puede suponer un mayor estrés para el organismo de la mujer y de su bebé, lo cual no es un efecto que pueda ignorarse", añadió Business Insider.

Pero un estudio de 2012 publicado en Human Reproduction determinó que los padres mayores con frecuencia proporcionan a sus hijos muchos beneficios que no pueden ofrecerles los padres jóvenes, específicamente el hecho de que tienen ventajas sociales, económicas y emocionales que brindan al niño una familia estable, informó Psychology Today.

Esos padres no sólo tienen "una carrera consolidada, seguridad económica, una relación comprometida con el otro progenitor y una mayor preparación emocional", sino que también han desarrollado un mayor grado de paciencia y conciencia de sí, lo que les facilita la crianza de su hijo, agregó Psychology Today.

"Sé que tengo más autoconciencia que hace veinte años", dijo un padre mayor que participó en el estudio. "Siento que estoy en mejor posición para desarrollar una buena comunicación con mi hijo."