Marcela Ríos es nutrióloga, tiene 26 años, y desde hace tiempo tomó la decisión de no tener hijos.

Ante una sociedad irresponsable en planificación y con los costos de vida en aumento, la joven asegura que no tiene tiempo, ni interés por adquirir la responsabilidad de otro ser humano.

“Es una decisión plena, porque en realidad nunca sentí el instinto materno, no me llaman la atención los bebés, he convivido con niños pero nunca me gustó”, dijo la joven.

La saltillense lamentó que a las mujeres se les inculque una disciplina materna desde el nacimiento, y aseguró que desde su libertad femenina ha decidido trascender sin la necesidad de tener descendientes; sin embargo, a pesar de tener firmes sus convicciones, aseguró que no es sencillo expresar sus decisiones, porque en principio es cuestionada y señalada por su propia familia.

“Al decirlo, mis papás reaccionaron con sorpresa porque ellos querían tener nietos, no todas mis amigas me comprenden, siempre me dicen que cuando tenga hijos voy a dejar de pensar así, la gente sí te señala por pensar distinto”.

UNA NUEVA FORMA DE VER LA VIDA

Esto no se trata solo de una moda, sino que forma parte de una tendencia que crece no solo en Saltillo, sino en todo el mundo, con grupos de mujeres que dan el primer paso en torno a sus decisiones personales, como son tener hijos, tener o no pareja, o enfocar sus sueños y preferir su vida profesional.

Marcela aseguró que al menos cuatro de sus amigas se han practicado la salpingoplastia: “para de plano no tener si quiera riesgo de embarazo, somos muchas las que pensamos así, es innecesario tener un hijo, a veces la gente es irresponsable y tiene hijos sin poder mantenerlos, yo he decidido trascender de otra forma”, señaló la joven.

¿EXISTE EL INSTINTO MATERNO?

El instinto materno no es algo con lo que nace una mujer, es decir, por el simple hecho de tener sexo femenino no quiere decir que forzosamente debes tener hijos, o anhelar convertirte en madre.

Esta premisa es apoyada por la psicóloga Berenice de la Peña, responsable del área de Recursos Humanos en la Facultad de Psicología, quien aseguró que las mujeres tienen derechos sexuales y derecho a elegir y tomar decisiones, lo que incluye ponerse como centro de la vida, en lugar de poner a un hombre o incluso a los hijos.

“En lugar de darse a los demás o sacrificarse por los demás, en lugar de decir primero los hijos o la familia, ahora las relaciones y objetivos, metas y proyecto de vida empieza a ser diferente y todo esto va de la mano con una liberación que ya está en Saltillo”.

Aseguró que la comunidad femenina ha dejado atrás discursos sobre empoderamiento y ahora se están adoptando nuevos roles y nuevos patrones sociales, sin embargo, lamentó que las generaciones de personas mayores de 45 años aún mantienen esquemas tradicionales.