DALLAS.- Perdida en medio del debate entre los mariscales de campo Dak Prescott-Tony Romo, la defensiva de los Cowboys de Dallas aprovecharon para liberar presión y mejorar en la medida de sus posibilidades.

En especial, si se considera que la semana anterior permitieron 30 puntos a unos Steelers de Pittsburgh que parecían mover el balón y anotar a placer, sin problemas.

La defensa de los Cowboys hizo jugadas por momentos y ha mejorado. Sin embargo aún dista de ser tan agresiva y limitante como debería un equipo que piensa trascender y más para un equipo que tiene una de las mejores ofensivas de la liga, con dos novatos al mando. 

Además, las lesiones de tres de los cuatro principales jugadores de perímetro hacen que aún sea más difícil la situación, aún más por la falta de presión a los mariscales de campo rivales.

“Creo que hemos mejorado, pero falta más trabajo para llegar a donde queremos estar”, reconoció el coordinador defensivo de los Cowboys de Dallas, Rod Marinelli.

“Necesitamos mejorar en cosas básicas como tackle, asignaciones, ejecución. Los muchachos trabajan fuerte cada semana. Hay que seguir progresando”, añadió el coordinador.

Marinelli ha tenido que armar una defensa competitiva en la medida de las posibilidades de un personal escaso de nombres estelares, más allá del linebacker Sean Lee, por la suspensión de 10 partidos de Rolando McClain, por violaciones al reglamento. 

Además, los que se suponía serían sus dos principales alas defensivas, DeMarcus Lawrence y Randy Gregory, comenzaron la campaña suspendidos por consumo de sustancias prohibidas.

Lawrence ha regresado poco a poco y parece que empieza a tomar ritmo en las semanas más recientes en su presión a los quarterbacks rivles, aunque apenas el pasado domingo frente a los Steelers consiguió su primera captura, ante un debilitado ‘Big Ben’, que viene de recuperarse de una lesión. 

La defensa de los Cowboys sabe que su principal obligación no es mantener en cero el marcador o detener por completo a los rivales. En una liga como la del futbol americano es casi imposible pensar en eso.

“Nuestro trabajo es dar a nuestra ofensiva una oportunidad de ganar”, mencionó Lawrence. 

La defensiva de los Cowboys es la décimo segunda en yardas totales permitidas; la número 21 contra el pase y mucho mejor contra la carrera, ya que se encuentra en la tercera posición. Más importante aún, es la octava  mejor en puntos permitidos por juego con un promedio de 18.9.

Ningún corredor o receptor había superado las 100 yardas por pase o carrera hasta la semana anterior, cuando Antonio Brown, de los Steelers, atrapó 14 pases para 154 yardas.

“Una de las cosas que tratamos de minimizar en cada partido son las jugadas grandes”, dijo el entrenador en jefe, Jason Garrett. 

“Es un reto que tenemos cada semana. No hemos jugado perfecto, pero la mentalidad y las ganas nos han inspirado a todos a lograr nuestros objetivos”.

Lee, el alma de la defensiva, reconoció que la temporada ha sido increíble para los Cowboys de Dallas. 

“Hemos puesto mucho trabajo en esto y estamos jugando de la manera correcta”, dijo Lee. 

Lee y el resto de la unidad defensiva podrían recibir ayuda después del próximo partido en contra de los Ravens de Baltimore cuando McClain cumpla sus 10 partidos de suspensión.