Estimado director,

Gran talento de Mendoza, caricaturista de VANGUARDIA. Una sola observación; la propiedad de la Ciclovía no es de la UAdeC ni del que la trabaja, pero su usufructo es del que la “pedalea”. Y siendo un espacio público, todos podemos “pedalearla”.

En las ciudades; las vialidades, banquetas y parques públicos, constituyen el soporte material de la libertad de tránsito, garantía otorgada a todos los ciudadanos en el artículo 11 de la Constitución. Subrayo ciudadanos, porque son ellos y no sus medios de transporte (auto, bici, patineta, chanclas o lo que usted imagine) quienes tienen el derecho de disfrute de esta garantía constitucional. Así es de que, como reza el dicho: “¡A mí mis chicles!”.

Con las seguridades de mi más atenta y distinguida consideración.

Dr. Alejandro Dávila Flores