Citlalli Guerrero es una enfermera de apenas 20 años, quien ve muy lejos su sueño de estudiar una especialidad, pues ésta sólo puede tomarse en Monterrey y el sueldo de una enfermera no da para poder pagarla.

Una enfermera llega a ganar de mil 500 a 2 mil 300 pesos a la quincena, y sólo logran obtener al menos 300 pesos más si tienen alguna especialidad, por lo que Citlalli considera que la profesión de enfermera es menospreciada por la mala paga.  

Comentó que un hospital no funciona si no hay enfermeras y que eso la gente no lo ve. 

“Yo estudié enfermería porque en mi familia hay varias personas que se fueron por el tema médico, a mí me parece una profesión muy noble pero muchas personas piensan que no hacemos nada, pero la verdad es que somos nosotras las que hacemos funcionar a los hospitales, nosotras cuidamos de la gente, no importa si estamos de mal humor, cansadas o nos sentimos mal, tenemos la vocación de atender con cariño a todo aquel que lo necesite”. 

El sueño de Citlalli es estudiar la especialidad quirúrgica pero ésta sólo se puede cursar en Monterrey, sus posibilidades son muy pocas pues su salario es bajo y la mensualidad es de 3 mil pesos, esto sería dar su salario de un mes y ni así alcanzaría, por lo que no sabe cuándo podrá volver realidad su ilusión. 

En el tiempo que tiene como enfermera recuerda que una de las cosas más difíciles que ha tenido que hacer fue cuando le tocó cuidar a una mujer que tenía una hernia en la espalda, ya que ella sufría mucho y no podía moverla por el dolor.

“Fue difícil porque ver su sufrimiento sí era doloroso, porque por más que una trataba de ayudarla no se le quitaba el dolor con nada y era imposible operarla”. 

En Coahuila son muy pocas las enfermeras que cuentan con alguna especialidad, son alrededor de 15, esto resulta limitante para las enfermeras pues en Coahuila no existen instituciones educativas donde puedan obtener una especialidad. 

Citlalli dice que una persona que elige esta profesión debe de estar consciente de que su deber es servir y que siempre debe de dar una buena cara a los pacientes y tratarlos con cariño, pues es lo que ellos buscan al ver a una enfermera ya que son como “salvadoras” que calman el dolor y los hacen sentir mejor.