Es muy latente la idea de que el césped del Estadio Azteca no quede al 100 por ciento tras los juegos del América, Cruz Azul y los conciertos de la cantante colombiana Shakira, para la llegada de la NFL a México.

Y es que el pasto de dicho inmueble se requiere en buen estado para dicho evento, por lo que las autoridades de la Liga más importante de futbol americano en el mundo enviarán delegados antes de tiempo para que revisen la cancha y se cercioren de que las condiciones sean óptimas para el juego que disputen los Chiefs y Rams.

El encuentro, que será el segundo Monday Night que se juegue fuera de Estados Unidos, es el 19 noviembre, por lo que falta un mes para que el Coloso de Santa Úrsula se reponga de dicho daño y no afecte las acciones entre los cuadros de Kansas City y Los Ángeles respectivamente.

Además de la gente que revisará minuciosamente el campo de juego, la próxima semana acudirán expertos que pertenecen al Sindicato de Jugadores.

Desde el lunes de la semana en curso, empleados trabajan sin descanso desde primeras horas del día para que el campo en donde jugarán Tijuana y América, el sábado a las 7 de la noche, quede lo más cercano a "estable" y que no sea impedimento para que se dispute dicho encuentro.