SAN NICOLÁS DE LOS GARZA.- La alegría, el buen humor y el optimismo invaden el campamento de Tigres tras haber regresado con la ventaja mínima del duelo de ida de semifinales ante León, por lo que los esmeraldas se ven obligados a buscar dos goles el próximo sábado en el Volcán, sin que los universitarios vuelvan a anotarles.

“Respecto al regresar a casa, a Monterrey con un buen resultado, con un resultado a favor, nos genera optimismo, alegría, creo que el humor y la buena onda se deja ver cuando las cosas salen bien, pero también entendemos que quedan 90 -95 minutos para conseguir el objetivo que nos planteamos que es pasar esta fase”, comentó el portero Nahuel Guzmán.

Sin embargo el argentino sabe también que estarían cometiendo un gravísimo error al subestimar a su rival y pensar que ya tienen asegurado su lugar en la gran final, por lo que deberán encarar el juego de vuelta con una gran concentración.

“No podemos relajarnos, no podemos pensar en que por haber conseguido un buen resultado ya está la fase decidida, que ya tenemos el pase en la mano, sería un gran error y obviamente no podemos subestimar a un rival como León que en el último tiempo ha conseguido no recuerdo si 22 de los últimos 26 o 28 que ha jugado”, expresó el guardameta felino.

Nahuel sabe que Tigres no pudo aprovechar el momento que tuvo para incrementar su ventaja ante los Panzas Verdes, pues después del gol de Gignac, León se descontroló y les dejó espacios, por lo que ahora deberán de buscar otra anotación en casa, cuando reciban a los del Bajío.

“Mi sensación es que después del 1-0 tuvimos 10 o 12 minutos el León se desordenó un poco y había comenzado a correr detrás de la pelota, de que nosotros habíamos encontrado circulación de un lado a otro y teníamos espacios tanto de posesión como en contragolpe”, concluyó.