Ciudad de México. En México se han cometidolo 673 feminicidios en lo que va del año, expresó la activista Verónica Villalvazo, conocida como Frida Guerrera, quien dijo que Guanajuato, estado de México, Veracruz y Guerrero, ocupan los primeros lugares de crímenes de odio contra mujeres, seguido de Puebla, Chihuahua, Ciudad de México, Oaxaca y Baja California.

"Sólo en estos días 32 de esos asesinatos son niñas menores de 14 años."

Durante la presentación de su libro #NiUnaMás, donde informa que en 2016 en el país hubo mil 559 mujeres asesinadas, lamentó que en algunos estados, autoridades relacionan los asesinatos de mujeres con el crimen organizado y dejan de investigar cuando en realidad se trata de feminicidios.

Por su parte el padre y activista social Alejando Solalinde expresó que desde los sexenios panistas de Vicente Fox y Felipe Calderón a la fecha, la violencia contra las mujeres ha aumentando.

Aseguró que el alto clero del estado de México junto con políticos mexiquenses "han abonado a las consecuencias de inseguridad en todos los hábitos. Mexico es un país que no cuida ni valora a las mujeres. No podemos seguir así. Debemos descubrir las causas, desentrañar a aquellos actores que ocasionan este desprecio, violencia, menosprecio y destruccion a las mujeres, de lo contrario México se seguirá destruyendo."

Agregó que la autora refiere en el libro que agredir, violentar, asesinar a la mujer es un acto de autodestrucción y que el feminicio en el país se ha normalizado y gracias a un gobierno" inepto, insensible, fallido, con un silencio eclesiástico evidente.

"Frida se centró en el epicentro de la violencia de género en el continuo riesgo de la represión del crimen organizado, especialmente en el estado de México. Hay corrupción, impunidad, complicidad oficial de colusión institucional. Hay silencio de la iglesia, especialmente de la Diósesis mexiquense, una iglesia que ha sostenido la cultura del patriarcado que se debe de acabar, dice Frida."

Tambien en libro el #NiUnaMás, Verónica Villalvazo relata que el feminicidio a nivel nacional se ha convertido en una práctica común ya que las cifras superan cualquier expectativa y que el problema no sólo ocurre en las clases más necesitadas del país sino trasciende y aparece en todos los estratos de la sociedad.