En el clásico joven: técnicos en peligro

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En el clásico joven: técnicos en peligro

Foto: Tomada de Internet
Cruz Azul y América se enfrentan este sábado en un duelo donde ambos técnicos se juegan la chamba

Este sábado se disputará una edición más de un clásico ya viejo, pero que le hacen llamar jóven. Cruz Azul y América se verán las caras en la jornada 8 del Apertura 2016, ambos envueltos en la polémica por los bajos resultados obtenidos esta campaña.

Tomás Boy e Ignacio Ambriz, buscarán reivindicarse con su afición y tomar un poco de credibilidad en un momento en el que no han logrado convencer a su afición, debido al mal funcionamiento y malos resultados. Ambos técnicos cuentan con el "respaldo" de sus directivas, pero una derrota en este partido podría costarle el puesto a alguno de los dos.

Pareciera que Igancio Ambriz, cuenta con menos presión para este duelo, sin embargo la derrota sufrida hace un par de semanas frente a las Chivas por un marcador escandaloso, obliga a los de Coapa a sacar un buen resultado del otro gran duelo que no tienen permitido perder. Aunque suena difícil que Ambriz pueda dejar el cargo en este torneo, un mal resultado frente a la máquina lo pondría en una situación sumamente desagradable y podría terminar por ser el vaso que derrame la gota para que Ricardo Pelaez retire la confianza al proyecto de Ambriz.

Por su parte Tomás Boy, con ocho puntos y solo una victoria en el torneo, es el técnico que corre más peligro en caso de no sacar los tres puntos en este duelo. El 'Jefe' no ha logrado mostrar su calidad en el banquillo y ha desperdiciado a lo que él consideró el mejor grupo de futbolistas que ha dirigido en su carrera. La 'Máquina necesita de un triunfo para poder mantenerse cerca de los puestos de liguilla y para no seguir bajando en la tabla de cocientes, donde incluso ya corren el riesgo de meterse en problemas porcentuales. 

Este duelo podría ser decisivo para que alguno de los dos técnicos puedan dejar su puesto al frente del equipo, por lo que ambas escuadras saldrán a muerte para conseguir la victoria, ya que se juegan más que tres puntos.