Marit Bjoergen ganó este domingo su quinta medalla en PyeongChang 2018, la segunda de oro, al anotarse la prueba de 30 kilómetros, estilo clásico -con salida en masa- de esquí de fondo, con lo que mejoró su propia plusmarca absoluta de trofeos en citas invernales y, de paso, hizo que su país, Noruega, ganase el medallero en estos Juegos.

Bjoergen, de 37 años, ganó la prueba, la última de estos Juegos, disputada en el Centro de esquí nórdico de Alpensia de PyeongChang, con un tiempo de una hora, 22 minutos, 17 segundos y seis décimas; y se impuso con enorme claridad, con una ventaja de un minuto y 49 segundos sobre la finlandesa Krista Parmakoski.

El bronce fue para la sueca Stina Nilsson, que entró a un minuto y 58 segundos de Bjoergen, que con el título ganado este domingo ha mejorado su propio récord absoluto -entre hombres y mujeres-, alzándolo a ocho oros, cuatro platas y tres bronces.

Su victoria también sirvió para que Noruega ganase el medallero de la XXIII edición de los Juegos de invierno, clasificación que no se decidió hasta la última prueba.

Alemania había ganado oro y plata en bobsleigh por la mañana; y la plata, por la tarde, al perder la final de hockey masculino contra el equipo ruso en los Juegos de PyeongChang, en los que Bjoergen decidió la clasificación de trofeos para su país al ganar la última prueba de esquí de fondo, que cerró la competición olímpica en Corea del Sur.