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Empresas cobran más de 15 mil millones por dar servicios a 8 penales
El Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social (Oadprs) destina 15 mil 400 millones de pesos al año, 70 por ciento de su presupuesto, para pagar a las empresas que construyeron y se encargan de los servicios de ocho penales federales, por lo cual la dependencia revisará los contratos.
Bajo el esquema de contrato de prestación de servicios (CSP) se dieron convenios por adjudicación directa en 2010 a empresas para la construcción, equipamiento y operación de ocho centros penitenciarios con vigencia hasta 2032.
A decir de Francisco Garduño Yáñez, comisionado del Oadprs, se privatizaron los servicios en esos penales que comprometen la vida de otros gobiernos, ya que es como si compraras una deuda.
Con 30 por ciento que queda del presupuesto, el órgano debe destinarlos a los otros penales federales de los que se encarga directamente; sin embargo, ahí también hay una deuda con la empresa que obtuvo la concesión para encargarse de los alimentos.
Debemos mil 800 millones de pesos a una empresa; no conozco una razón social que pueda tener el financiamiento de esa cantidad. Si la empresa me dice mañana se terminó, yo no tendría la capacidad de dar de comer [a los internos] y tendría que sacar recursos de Hacienda y poner un plan emergente para que custodios y personal penitenciario hicieran la comida inmediatamente, advierte.
Está en manos del Presidente que se indague, subraya luego de comentar que erogan casi 3 mil millones de pesos al año por los Ceferesos de los que ellos se hacen cargo.
Dice que antes de terminar el sexenio anterior, ennoviembre pasado, se firmaron contratos bianuales y trianuales; por eso en la actual administración no hemos dado un solo contrato, estamos revisando lo que se firmó, porque también hay contratos con empresas para el suministro de medicamento, uniformes, entre otras cosas, que se requieren para los penales.
En 2016, la CNDH informó que los CPS de Sonora, Guanajuato, Oaxaca, Durango, Chiapas y el femenil de Morelos no tenían el personal médico suficiente y había deficiencias en suministro de medicamentos y falta de capacitación a custodios, entre otros problemas.