Ante la caída que presentan los ingresos tributarios, entre las opciones del Gobierno Federal para incrementar sus recursos estará eliminar tasas cero, exenciones y fortalecer la fiscalización consideró Jorge Ayax Cabello Hernández.

El director de Saltillo Asesores indicó que la expectativa que se ve para el corto y mediano plazo, es probable que después de las elecciones se estudie, analice y evalúe el tema de la Reforma Fiscal, pero fuera de una simplificación fiscal, estará enfocada en cómo incrementar los ingresos del Gobierno.

“Cómo se prevé que se va a incrementar, por dos puntos, uno por la eliminación de exenciones, de tasas cero y de facilidades fiscales que actualmente tienen algunos giros, creo que por ese lado es donde se va a buscar que haya un mayor flujo de ingreso y el otro pilar seguramente será un fortalecimiento en la fiscalización para que sea todavía más severa para las empresas, tanto en la parte del SAT, como el Seguro Social, el Infonavit y parte de este tema integral es la Reforma al Outsourcing”, aseguró.

En el caso de la eliminación de exenciones éstas se pueden presentar en el caso de los donativos y herencias que hoy están exentas, así como eliminar las de IVA que hay en alimentos y medicinas, así como en ganancias en la Bolsa Mexicana de Valores.

Aunque de acuerdo a lo prometido no se aplicará un aumento de impuestos, lo que sí incrementará será la base gravable y con ello al final se tendrá que pagar mayores impuestos, aunado a ello aumentará la fiscalización tan severa que se empezó a sentir desde el año pasado.

Mientras que reducir gasto o pedir prestado son opciones que no se ven viables por el tema político, por lo que muy seguramente se verán los ajustes por el lado del ingreso al eliminar las áreas grises que se tienen por la parte tributaria.

‘NO HUBO PLANES CONTRACÍCLICOS’

Por su parte, el CEO de Capital Analyst, Raymundo Díaz, comentó que una de las principales consecuencias de la caída de la recaudación fiscal fue que no existieron planes contracíclicos fiscales.

Agregó que más de un millón de empresas cerraron y no se espera que vuelvan a abrir, por lo que ello pegó también a la recaudación, lo que generó un ciclo vicioso, no existió un plan para que sobrevivieran muchas empresas y por ello, cayó el número de personas morales y con ello se redujo el nivel de contribuyentes.