El triunfo de la mezquindad(2)

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El triunfo de la mezquindad(2)

¿Porqué estos estudiantes, ubicados entre los 90 puntajes más altos de 700 aspirantes cada año, se dejaron manipular para destruir la continuidad de un Nuevo Plan de Estudios que ubica a su Facultad de Jurisprudencia, en la vanguardia nacional, latinoamericana e internacional?

Azuzados los estudiantes por sus mentores, se atrincheraron para negar las virtudes de ese Plan de Estudios que incorpora los derechos humanos como tema transversal en materias y acentuaciones como género, transparencia, conciencia ambiental, desarrollo sostenible y derecho comparado; sin soslayar el área civil, tan sólida en la historia de la Facultad.

Dicho Plan de Estudios está actualizado con las reformas de Derechos Humanos y del Sistema de Justicia Penal Acusatoria a nivel nacional e internacional. 

¿Por qué esta actitud irracional e intolerante de los estudiantes para negar la continuidad de aprender las competencias que les permitirían enfrentar y superar los retos globales que plantea el ejercicio de su vocación en el Siglo 21?

La respuesta es sencilla. Esos estudiantes y sus incitadores, no entienden el derecho como vocación de servicio acrisolada en los derechos humanos fundamentales de las personas y su entorno. Tampoco lo entienden como una profesión alineada a estándares académicos del más alto nivel nacional, latinoamericano e internacional. Mucho menos, como el instrumento para construir una sociedad más justa, más equitativa y más comprometida con el hombre. 

Para esos estudiantes y sus mentores, el derecho alcanza su nivel más mezquino: Es un vehículo para acceder al poder político como burócrata de alto nivel. Sin exquisiteces de derechos humanos, de por medio.

¿Cuántos abogados de esa Facultad de Jurisprudencia de la UAdeC Campus Saltillo, han alimentado esa relación, en muchos casos parasitaria, con el Gobierno Estatal? En este caso, los dos ejemplos más visibles, son los titiriteros del movimiento estudiantil: Alfonso Yáñez Arreola, Secretario Particular del Ejecutivo y Óscar Nájera Davis, Magistrado del Poder Judicial.