Es bien sabido que Irlanda del Norte ha sido una de las principales locaciones de la serie Game of Thrones. Se ofrecen varios tours para conocer los sitios donde se han filmado las escenas más famosas; sin embargo, existen algunas experiencias que van un paso más allá: hacerte sentir como un personaje de la serie.

Winterfell Tours es una empresa que organiza recorridos por Castle Ward, un castillo que data del siglo XVIII, situado a casi una hora de Belfast. Este sitio, y específicamente su enorme granero, se utilizó para representar Winterfell.

En su actividad de arquería, puedes vestirte como un miembro de la casa Stark y aprender tiro con arco. La edad mínima para intentarlo es de ocho años e incluyen un recorrido por el castillo.

Si prefieres conocer más a fondo la locación, hay paseos en bici por la residencia y sus alrededores. Eso sí, aquí también puedes disfrazarte con ropa inspirada en la serie.

Seguramente recuerdas a los lobos huargo, las letales mascotas de los hijos Stark. En Castle Ward aún puedes conocer a dos ejemplares. En realidad, se trata de perros de la raza Northern Inuit, pues la producción de la serie no podía usar lobos reales. Previa cita, los visitantes conviven con los perros, que en la vida real llevan nombres de dioses vikingos.

Y si eres realmente valiente, existe la posibilidad de pasar una noche en el tenebroso bosque de “Winterfell”, en una experiencia glamping, es decir, es como si acamparas, pero con todas las comodidades.