El sueño ‘murió’ para Ranieri

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El sueño ‘murió’ para Ranieri

Despedido. Claudio Ranieri fue despedido luego de ser campeón con Leicester, pues ahora pelean por no descender. / Foto: AP
Mientras el técnico italiano esperaba dirigir por siempre al equipo de sus amores, el Leicester City, con quien fuera campeón de la Premier, los jugadores le dieron la espalda y perdieron el espíritu colectivo, orden y trabajo incansable para dejarlo fuera del banquillo
Nadie podrá quitarnos lo que logramos juntos, y espero que piensen en eso y sonrían todos los días, como yo haré por siempre”
Claudio Ranieri, estratega campeón con Leicester

LONDRES.- Claudio Ranieri afirmó que su sueño “murió” cuando fue despedido como técnico de Leicester, nueve meses después de conquistar un improbable título de la Liga Premier con el pequeño equipo del centro de Inglaterra.

“Mi único sueño era seguir para siempre con Leicester City, el club de mis amores. Lamentablemente, esto no sucederá”, dijo el italiano en un comunicado divulgado el viernes.

Leicester ganó el título de la Premier la temporada pasada, una gesta impensable para un equipo formado por jugadores desconocidos y descartados por otros clubes.

Hundidos cerca de la zona de descenso esta campaña, el club despidió el jueves a Ranieri.

En un mensaje dirigido a los hinchas de Leicester, Ranieri agregó que “nadie podrá quitarnos lo que logramos juntos, y espero que piensen en eso y sonrían todos los días, como yo haré por siempre”.

Fue otra víctima en el juego de poder del futbol

Después de la gesta que logró la temporada pasada, muchos pensaban que Claudio Ranieri entrenaría a Leicester por el resto de su carrera.

El timonel italiano condujo a un plantel formado por jugadores desconocidos y descartados hasta el título de la Liga Premier, en una campaña que pareció sacada de un cuento de Disney. Renieri hizo realidad algo casi imposible, y convirtió a Leicester en la historia más entrañable de un deporte en el que el dinero dicta casi todo.

‘Cenicientas’. Leicester se coronó campeón de la Liga Premier de Inglaterra bajo el mando de Ranieri y con un grupo de jugadores desconocidos, como si fuera un cuento de hadas. / Foto: Especial
Mi único sueño era seguir para siempre con Leicester City, el club de mis amores. Lamentablemente, esto no sucederá”
Claudio Ranieri, técnico italiano ex del Leicester City

Por eso su despido el jueves produjo tanta sorpresa y consternación. La junta del club le anunció la decisión inmediatamente después de regresar a Inglaterra tras perder 2-1 en su visita a Sevilla por los Octavos de Final de la Liga de Campeones.

La opinión generalizada es que el veterano entrenador merecía algo mejor.

“Imperdonable”, tuiteó Gary Lineker, un exjugador de Leicester y de la selección inglesa.

“Ingleses Malagradecidos”, tituló la portada de la edición del viernes del diario deportivo italiano Gazzetta dello Sport.

Sin embargo, un análisis en frío revela que la decisión de los dueños tailandeses de Leicester era casi inevitable. Sencillamente, Ranieri fue la más reciente víctima de una lucha de poder.

En pocas palabras, el plantel había dejado de responder a Ranieri. El fin de semana pasado, el técnico acusó a su equipo de no tener “corazón y deseo” al perder 1-0 ante Millwall de la Tercera División en un partido por la Copa de la FA. Las virtudes que ayudaron al equipo a conquistar el más improbable título en la historia del futbol inglés —espíritu colectivo, orden y trabajo incansable— habían desaparecido.

El viernes, algunos medios británicos reportaron que jugadores de peso en el vestuario dijeron a los dueños del club después del partido contra Sevilla que la situación era insostenible con Ranieri.

El italiano aparentemente quedó a merced de sus jugadores, con el equipo cerca de la zona de descenso en la Liga Premier.

Cuando me despidieron el año pasado, siendo campeón, pensé que era algo inmensamente negativo... Ahora entiendo que no fue nada comparado con lo que le pasó a Claudio”
José Mourinho, estratega del Manchester United

“Había mucha frustración debido a los resultados”, dijo el técnico asistente de Leicester, Craig Shakespeare, quien quedó a cargo del equipo de forma interina. “Pero él (Ranieri) no había perdido al vestuario”.

La influencia de los jugadores le ha costado el puesto a otros técnicos en el pasado.

En diciembre de 2015, José Mourinho fue despedido por Chelsea siete meses después de ganar el título de la Liga Premier. Al igual que Leicester ahora, Chelsea estaba apenas un punto por encima de la zona de descenso en ese momento. Días antes del cese, Mourinho dijo tras un revés 2-1 en Leicester que se sentía “traicionado” por sus jugadores.

Algo similar le sucedió a Roberto Mancini en 2013 con Manchester City, también despedido menos de un año después de ganar la liga.

“Cuando me despidieron el año pasado, siendo campeón, pensé que era algo inmensamente negativo”, dijo Mourinho. “Ahora entiendo que no fue nada comparado con lo que le pasó a Claudio”.