Carlos Ahumada volvió a estar en el ojo del huracán tras ser capturado por la policía en Argentina, a petición de México, por un fraude fiscal en el 2012.

Además de ser famoso por los videoescándalos sobornando a políticos y ser la pareja de Rosario Robles, Ahumada fue dueño del León y durante su estancia en el futbol mexicano, manchó el Verano 2003 en el Ascenso MX, al sobornar a jugadores de Lagartos de Tabasco. 

A pesar de nacer en Argentina, Carlos Ahumada era "saltillense". De acuerdo a la Revista Proceso, falsificó tres actas de nacimiento. Su madre, Mercedes Kurtz, consiguió que el oficial noveno del Registro Civil adscrito a La Aurora, Coahuila, Roberto García Sánchez, reconociera legalmente a Carlos Ahumada como ciudadano mexicano, nacido en Saltillo, Coahuila. 

Así quedó asentado en el libro I, tomo II, folio 242, foja 042 de la oficina del Registro Civil del municipio de La Aurora.

En el documento oficial se consigna, además, que Carlos nació en el Hospital Civil de Saltillo, a las 2:00 horas del día 11 de junio de 1964, y que sus padres eran mexicanos. 

En el Verano 2003, León estaba en la llamada Primera A y Ahumada quería a toda costa subir a Primera División. Contrató a Carlos Reinoso como técnico y armó un "trabuco" donde figuraban Sigifredo Mercado, Cirilo Saucedo, Julio César Yegros entre otros. 

A pesar de ser favoritos, en los cuartos de final perdieron 2-0 en la ida ante los Lagartos de Tabasco que dirigía Antonio Carlos Santos con el exchiva, Camilo Romero como capitán. 

De acuerdo al Fantasma Suárez en su columna de Récord, Reinoso y Ahumada sobornaron a los jugadores de Tabasco para que se dejaran ganar en el juego de vuelta.

“Cómo no me voy a acordar de ese partido, mi Nacho. Me acuerdo perfecto de esa chingadera. Si llegamos al juego con una ventaja de 2-0 y un día antes del partido Ahumada y Carlos Reinoso le ofrecieron 500 mil pesos por lo menos a cinco jugadores", dijo Antonio Carlos Santos en entrevista con el Fantasma.

El "Negro" Santos se enteró del soborno gracias a su capitán, Camilo Romero, que no aceptó el dinero para no manchar su nombre. 

"Mira, el que habló conmigo la mañana antes del juego fue Camilo Romero, que era el capitán. No me dijo con qué jugadores habían hablado Ahumada y Reinoso, solo me dijo que lo habían contactado a él y que no aceptó, que él me decía eso porque tenía una carrera intachable y no quería problemas, que si quería mejor no lo metiera. Y eso se lo agradecí mucho, porque fue valiente y derecho”. 

Durante el juego el equipo fallaban las más claras y no las metían pero en el segundo tiempo les marcaron un par de goles a balón parado. 

"No mam.. güey, nos sacaron el partido en minutos en el segundo tiempo, nos metieron cuatro. Nos eliminaron y paso el León. ¿Pero sabes que fue lo peor y lo más evidente?, que al otro día al bajar a desayunar al hotel ya NO estaba nadie del equipo ¡Nadie!".

Así, el León avanzó a la siguiente fase sin embargo el equipo que ascendió fue Irapuato.