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El PRI es como la música banda: Zabaleta
CDMX.- El PRI se asocia con la música de banda “porque es un poco misógina, fácil de aprender y lleva un ritmo único. Siempre es lo mismo”, dijo Susana Zabaleta (Coahuila, 1964), cantante y actriz con más de 20 años de carrera que encabeza el reparto del montaje “Carmina Burana” que este miércoles y jueves se representará en el Auditorio Nacional de Ciudad de México.
–En la obra hay una crítica muy fuerte al poder. ¿Cree que México necesita una Carmina Burana?–
“Estaría genial pero en México somos escandalosamente miedosos, nos comemos lo que nos dan. El temblor de septiembre por ejemplo nos sacudió a todos y cayó exacto a un año de las elecciones”.
–¿Qué necesita México?–
“Necesita personas no partidos. Ahora están de moda los candidatos independientes. Pero primero hay que ver quién es la persona, de dónde vino, por qué está ahí. El Gobernador de Nuevo Léon, por ejemplo, viene de ocho años en el PRI y lo cochino no se quita, lo maleado no se quita. Yo no digo que todas las personas que están en el PRI sean una mierda, pero habría que ver cómo fueron educados. Como decía mi abuela: ‘¿a ti quién te parió, cabrón?’. Porque la educación se mama. El ratero siempre será ratero y los hijos de los rateros siempre serán rateros”.
–¿Es muy machista México?–
“Yo tuve que salirme de mi casa. Me dije ‘este cuarto es muy pequeño para las cosas que sueño’. Agarré mis chivas y me vine a México. Ahora sí me respetan, pero me costó mucho”.
–Carmina Burana también es un canto a la alegría, al goce y al placer en una época muy puritana–
“Y la forma como se dice todo eso, debió de ser un truco para evitar la censura. A Hitler le gustaba mucho esta opereta. Como se sentía un dios, me lo imagino decidiendo esta música para sus entradas”.
–¿Con qué música asociaría al PRI? –
“Música banda, porque es un poco misógina, fácil de aprender y lleva un ritmo único. Siempre es lo mismo”.
–¿Y al PAN?–
“Son románticos, pobres. Son como el festival de la OTI”.
–¿Y a Morena?–
“Silvio Rodríguez. ‘Ojalá se te acabe la mirada constante / la palara precisa, la sonrisa perfecta’. López Obrador se ha perdido totalmente en el camino”.