La periodista Fernanda Echavarri, reportera de la revista progresista estadounidense Mother Jones, en una de sus colaboraciones se lanza contra la actuación del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, frente a la contigencia mundial por el COVID-19.

En su texto que titula "El presidente más irresponsable del continente en este momento no es Donald Trump", expone que en toda América Latina  los gobiernos han pasado las últimas semanas preparándose para una ola inminente de casos de coronavirus. En El Salvador, el presidente Nayib Bukele cerró las fronteras a los extranjeros. En Colombia, el presidente  propuso una cuarentena a nivel nacional. 

Pero en México, dice Mother Jones, su presidente invita a salir a restaurantes, pues "todavía estamos en la fase uno", dijo, y la semana pasada, en una serie de eventos en México, miles de personas se reunieron en el estado de Guerrero, y López Obrador fue visto dándose la mano y abrazando a la gente. Un video del presidente besando a una niña en la mejilla y recibiendo besos de mujeres en una multitud de simpatizantes generó críticas al mismo tiempo que la Organización Mundial de la Salud estaba alentando el distanciamiento social.

De igual forma, la periodista criticó el hecho de que en una de las conferencias mañaneras de AMLO sacó amuletos religiosos diciendo que esos eran sus escudos protectores contra la pandemia. 

La publicación igualmente se da cuenta de la desconexión que parece haber entre los mensajes públicos del presidente y lo que está haciendo su administración, ya que mientras las escuelas se cierran y Salud propone una "sana distancia", hasta con una heroína animada, su presidente sigue actuando como si no existiera una pandemia.

Y subraya que en un país de 130 millones de personas, los gobiernos estatales y locales han estado implementando sus propias medidas para ayudar a contener la propagación del coronavirus (aunque muchas personas todavía están abarrotadas de mercados, restaurantes y otros lugares públicos). Hasta ahora, ha habido más de 300 casos confirmados, 800 casos sospechosos y tres muertes.