Jesús David tenía 13 años y hace dos meses fue asesinado de un balazo en la cabeza, su error haber entrado a una finca de frutos supuestamente donde él junto cons sus amigos  tomarían algunos.

La madre del menor contó a Noticias Caracol como su único hijo perdió la vida.

“Dice el compañerito que cuando entraron, inmediatamente sintió un disparo. Cuando él se dio la vuelta, se dio cuenta de que mi niño va cayendo lentamente y lo ve tirado lleno de sangre”, cuenta Kelly Paz, madre del menor fallecido.

Algunos familiares informaron que no es posible que por una simple naranja, le haya quitado la vida.

José David, el niño de 13 años víctima de la intolerancia, recibió un disparo en la cabeza. Pese a que alcanzó a ser trasladado a un centro asistencial en Barranquilla, no sobrevivió.

El menor,  junto con algunos amiguitos, se bañaba en una ciénaga y por travesuras de la edad se subió por una pared a coger naranjas. Fue entonces, dicen testigos, cuando el dueño de la vivienda le disparó, hasta el momento las autoridades no han detenido a nadie.

El padre del menor informó que el niño era tranquilo, juicioso y muy tímido.

    “Los crímenes de los niños no pueden quedar impunes y menos en casos como este. Mi niño era una persona juiciosa, el pintaba y tenía el sueño de estudiar en Santa Marta”, aseguró el papá.

Mientras tanto el abogado que lleva el caso del menor ha señalado a Noticias Caracol que hay impunidad tras el caso, ya que por parte de la Fiscalía no se ha recopilado ningún elemento o información que dé cuenta de una investigación.