En medio de toda esta euforia que ha generado el Cruz Azul y la obtención del título de Liga, tras más de 23 años sin hacerlo, hay que resaltar la imagen de un futbolista que la mayor parte del tiempo estuvo por encima de los demás. Luis Romo se convirtió, poco a poco, en el jugador que mayor impacto generó en este equipo cruzazulino, tanto a la interna como hacia afuera.

Y no se trata de promover a un jugador para quedar bien o porque sea una estúpida moda. Es simplemente darle valor a lo hecho por un jugador que, con 25 años de edad y mucha personalidad, logró lo que otros —incluso con mejor currículum en su posición— no lograron conseguir con este equipo.

“Cuando llegas a Cruz Azul, te echas encima todo; no en el tema de lo que no han hecho otros, sino en que quieres hacer historia, que quieres ser tú el que cambie esa historia...”. Estas declaraciones de Romo fueron justo antes de iniciar la serie de cuartos de final ante el Toluca, y hoy tienen más valor, porque cumplió con lo dicho.

Es el tipo de jugadores que necesitan equipos con la eterna obligación de ganarlo todo, como el Cruz Azul o como el Guadalajara, club que tuvo la oportunidad de llevar a Romo a sus filas, pero que lo despreció por la falta de capacidad de sus dirigentes y exdirigentes para poder detectar el talento cuando lo tienen enfrente.

Aquí la historia: Cuando el ahora mediocampista campeón con Cruz Azul todavía jugaba para los Gallos Blancos, enfrentaron a las Chivas en el estadio La Corregidora. Romo ya comenzaba a destacar. Jaime Ordiales era directivo de la escuadra queretana y, en ese momento, se acercó a José Luis Higuera para decirle que si le daba tres millones de dólares en ese momento, sería su nuevo jugador. Higuera, con esta falta de tacto, respondió: “Ese no es un jugador para Chivas”. Luego, ya con Ricardo Peláez en el Rebaño, se volvió a rumorar el interés de los tapatíos, pero en medio de todo lo que gastó el actual director deportivo del Guadalajara, nunca se decidió a poner una oferta en la mesa, algo que sí hizo Cruz Azul, y ahí los resultados.

Aún es difícil saber si este muchacho irá a Europa o en cuánto tiempo lo hará. Calidad la tiene, pero debe ser muy inteligente, como lo ha sido hasta ahora, que ha demostrado estar por encima de la media de la Liga sin irse de la boca o aparentar algo que no es, y eso, en estos tiempos, es difícil de encontrar, por lo que este muchacho tiene un doble valor.