Rafael Caro Quintero es uno de los narcotraficantes más famosos en México y actualmente es prófugo de la justicia, sin embargo parte de su familia dejó a un lado las actividades ilícitas para representar a México en las Olimpiadas. 

Uno de sus hijos, Rafael Caro Elenes, es un destacado jinete de Jalisco y formó parte de la delegación mexicana en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008. 

El hijo del narcotraficante pertenece al Guadalajara Jockey Club con el cual regularmente compite en eventos de la Asociación Ecuestre de Jalisco, entre otras competencias.

  Además se encontraba registrado en la Federación Ecuestre Mexicana, organismo que autorizaba su participación en torneos nacionales.

Su gusto por los caballos se dio desde pequeño y entre sus logros destacan la medalla de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, celebrados en Colombia en el año 2006, donde Caro ganó en la modalidad de saltos por equipos.

 Asimismo fue el ganador del Clásico de la Escuela Hípica Jalisciense en 2010, torneo anual que celebra al coronel Vicente Mendoza, fundador de dicho club.

Pero en Estados Unidos consideran que Rafael Caro Elenes está involucrado en los negocios de su padre. En el 2013, la DEA lo incluyó junto a sus hermanos y su madre en las actividades ilícitas de Rafael Caro Quintero, que fue uno de los fundadores del Cártel de Guadalajara.  Con información de Milenio