Usted está aquí
El hambre le pide a la necesidad
He escuchado la expresión el hambre le pide a la necesidad muchas veces en referencia a los momentos en que alguien nos pide algo cuando no tenemos “nada” que darle. Usualmente la he escuchado en referencia al dinero, y confieso que he tenido momentos, muchos en que alguien me pide algo y no tengo. No me gusta la sensación de no poder aportar o colaborar o resolver una situación para otra persona. Generalmente busco la manera de hacerlo, aunque eso implica sacrificar algo mío. Total, ¿qué es lo peor que puede pasar?
¡Pueden pasar muchas cosas! Pero eso sería tema para otro espacio, uno de quejas. Hoy no tengo queja. ¡¿Pero cómo, yo sin queja?! Ayer se me ocurrió que cuando el hambre le pide a la necesidad tenemos la oportunidad de salirnos de lo obvio para incurrir en la creatividad. El hambre y la necesidad no tendrán ciertas cosas (efectivo, por ejemplo) pero tal vez tienen oportunidades de trabajo, o conocen a otras personas que pueden ayudar, o juntos los dos pueden idear una manera para que las cosas salgan con beneficio mutuo.
Desde marzo del 2020, y en mi caso, desde mucho antes, la opción de resolver situaciones de maneras no convencionales ha sido parte de quien soy, y de la vida y la manera de vivir de muchos de nosotros. Si el hambre y la necesidad se juntan para considerar las posibilidades, salen muchas ideas creativas. Entre más lo pienso, más creo que es una combinación que puede ser genial. Tal vez sea una manera, incluso, de darnos cuenta de cuáles son nuestras necesidades reales…¿será?