El Ethereum, la criptomoneda alternativa al bitcoin

La alternativa más popular es el Ethereum. Creada en 2015, se basa en la tecnología Blockchain, similar al Bitcoin. La novedad de Ethereum es que cualquier persona mediante algunas líneas de código puedes escribir contratos inteligentes con unos pocos conocimientos que tengamos al respecto.

La popularidad de las criptomonedas ha subido de forma muy drástica recientemente. Muchas son las personas que han comenzado a invertir en ellas, especialmente en la más popular de ellas que es el bitcoin. Sin embargo, muchos buscan alternativas al bitcoin para seguir invirtiendo en criptomonedas.

La alternativa más popular es el Ethereum. Creada en 2015, se basa en la tecnología Blockchain, similar al Bitcoin. La novedad de Ethereum es que cualquier persona mediante algunas líneas de código puedes escribir contratos inteligentes con unos pocos conocimientos que tengamos al respecto.

Las propiedades del Ethereum

En los últimos meses la popularidad de Ethereum ha subido drásticamente, al igual que su cotización. Mientras que  principios del 2017 se podía comprar un Ethereum por apenas US$ 9, en estos momentos se encuentra cotizado por arriba de los US$ 80. El crecimiento en su uso ha sido casi similar al aumento de su cotización, pues ha sido algo meteórico. Su valor ha aumentado mucho más rápido que la principal moneda digital, ya que su subida ha sido mayor que la de los Bitcoins.

Al igual que otras criptomonedas como el bitcoin, existe un número ya definido de unidades de Ethereum. El total de ethers creados como se definió en el año 2014 es de 60 millones. De esos 60 millones se repartieron un total de 12 para diferentes participantes. Una parte fue para la fundación Ethereum, otro para los desarrolladores y para los contribuyentes, y otra parte fue entregada para el fondo de desarrollo.

Por otro lado, como sucede con todas las monedas, hay fracciones. El euro tiene céntimos, y los ethers también pueden ser divididos en partes más pequeñas. Un ether se subdivide en unidades menores con el nombre de: finney, szabo, shannon, babbage, lovelace y wei. Cada una de éstas tiene un valor 1.000 veces superior que la anterior. En otras palabras, 1000 wei son 1 lovelace, y así en adelante.

Cómo comprar Ethereum

Para poder hacer operaciones con criptomonedas como Ethereum, vamos a necesitar de un broker. Por ejemplo, podemos usar Plus500, donde habrá que registrarse y dar nuestros datos e ingresar un mínimo de 100 euros o dólares para operar. Este proceso puede hacerse con calma, puesto que no estamos obligados a operar inmediatamente después de tener creada la cuenta.

Ahora sólo queda comprar y vender Ethereum mediante PayPal o con un método de pago distinto como Skrill o transferencias bancarias. Además, muchos brokers están relacionados con gobiernos, por lo que el miedo a una posible amenaza virtual que te haga perder todo y quedarte desamparado desaparece.

Además, existen muchas páginas web con información referente a los bitcoins como http://conselleriaiei.org/comprar-ethereum/ que dan pautas adecuadas para iniciarse en el mundo de las inversiones de criptomonedas y consejos y noticias para aquellos que sean más expertos o conozcan mejor el tema.

También cuentan con información relevante y actualizada sobre los brokers online. Comparaciones y análisis dando una extendida opinión sobre cuáles son los mejores brokers para operar con eficiencia y seguridad.

Es por esto que recomendamos su visita, ya que el futuro de este mercado es incierto pero que resulta muy atractivo para los que quieren unirse. Para todos aquellos que tengan dudas sobre invertir en Ethereum o no, los expertos opinan que el valor de estas monedas aún están lejos de su máximo potencial, por lo que la decisión de invertir en ellos antes de que su precio se eleve más y saquemos menos beneficios.

Sin embargo, muchos de los expertos hablan incluso de superar el millón de euros allá por el año 2021. Esto no son más que suposiciones, ya que podría ocurrir todo lo contrario y desplomarse. Es en estas situaciones donde encontramos una de las mayores debilidades del ethereum y el resto de criptomonedas, su futuro incierto, difícil de preveer y más cuando hablamos de una moneda tan volátil.