Edra Ochoa es una maestra extrema al mezclar sus dos pasiones, la docencia y el motocross, sus dos grandes amores que la han llenado de satisfacciones, siempre en pro de la formación y la disciplina.

Creciendo en una familia donde la afición por los motores se lleva en la sangre, a los ocho años de edad, Edra ya tenía su primer cuatrimoto, pero fue la docencia, que luego de darse a la tarea de ahorrar, le dio la que oficialmente sería su primer motocicleta para competencias.

Fue hace cuatro años y medio que Edra se adentró en la aventura de la docencia impartiendo clases de inglés en el Colegio Inglés de Saltillo, ubicado al sur de la ciudad. 

La joven estudiante de psicología, docente y además competidora de motocross, pertenece al equipo Saltillo MX que practica en la pista ubicada en el libramiento Óscar Flores Tapia y carretera 57.

Su primer gran alegría llegó en el 2015, obteniendo un segundo lugar tras superar una difícil carrera, que presentó serias complicaciones mecánicas.

Entre todas las experiencias que el motocross le ha permitido vivir, Edra recuerda una competencia con mucho cariño, se trataba de una carrera nocturna en la que la joven tomaba la delantera, sin embargo el cansancio se apoderó de ella en la última vuelta y se rezagó en el tercer puesto.

En un final de película, Edra da un salto en la moto para superar el último cruce, situación que no pudieron replicar sus contrincantes, luego del tremendo brinco Edra se posicionó nuevamente en el primer puesto y se coronó monarca del evento.

Haciendo una mezcla de pasiones, Edra define la disciplina como una de las grandes virtudes del motocross y la docencia.

“Se necesita mucha disciplina, constancia y ser muy responsable para este deporte, porque no es nadamos subirse a la moto. Y lo manejo así con mis niños, es una formación, tiene un proceso, es paso por paso”, expresó la deportista. 

Con una sonrisa en el rostro la joven reconoce que hace lo que te gusta nunca será una carga, “Me apasiona ser docente, la pasión con la que voy cada mañana y les doy mis clases, con las motos también se necesita mucha pasión para estar en este deporte”, compartió la docente. 

Finalmente dedicó unas palabras a todos los maestros que día se ponen al frente de un grupo para contribuir a la formación.

“Muchas felicidades, porque si es difícil, quiero reconocerles el trabajo que hacen, sigan así formando a sus alumnos. También se vale divertirse, diviértanse con ellos”, concluyó Edra.