Dos mil 253 millones de pesos en el aire; ¿cuándo aterrizan?
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Dos mil 253 millones de pesos en el aire; ¿cuándo aterrizan?
Para este año el Gobierno de Coahuila estima recaudar dos mil 253 millones 400 mil 111 pesos por concepto de Impuesto Sobre Nómina (ISN). Así lo estableció en su Ley de Ingresos 2018, publicada en diciembre de 2017.
Ahora bien, en un par de días arribaremos al mes ocho del calendario: esa fecha en que los centros comerciales promocionan el regreso a clases, las fiestas patrias, Halloween, pan de muerto y adornos navideños a la vez. Nos hallamos, pues, en el crepúsculo anual.
Por ello el cuestionamiento es oportuno: y el ISN, ¿para cuándo lo soltarán?
Me explico. Se trata de una contribución estatal, la más importante debido al monto. El caso es que Gobierno tiene la obligación de financiar obras públicas con ese dinero a través de un “Comité Técnico”. Ese 2 por ciento de remuneraciones gravadas al trabajador, por así decirlo, se ‘devuelve’.
Para tal efecto convocan y reúnen a una muestra representativa de contribuyentes denominados empresarios, les hacen creer que se involucran en las decisiones colectivas, y que tienen voz y voto; entonces desayunan papaya con queso cottage y deliberan obras públicas en conjunto. Sin darse cuenta legitiman el proceso.
La realidad, sin embargo, no es tan diáfana.
La Auditoría Superior del Estado reveló a principios de 2018 –a todo pasado, evidentemente- que durante todo el sexenio encabezado por Rubén Moreira (2011-2017) el ISN nunca se utilizó con ese fin. Que sirvió, por el contrario, para tapar un agujero en el fondo de reserva para la deuda pública (quién y por qué hizo el boquete, debería ser la pregunta obvia) y posteriormente ingresó a una bolsa de libre disposición (denominada oficialmente gasto corriente, o caja chica si lo prefiere usted).
El Consejo Cívico de las Instituciones Laguna, por su parte, acusó a finales de 2017 una doble contabilidad en las obras etiquetadas con el ISN, mismas que fueron financiadas con fondos federales a su vez. El señalamiento, justo es decirlo, nunca fue desmentido con suficiencia ni seriedad por Ismael Ramos, ex secretario de Finanzas y responsable.
La presunta duplicidad y eventualmente desvío que identificó el CCI Laguna se cuantificó en 715 millones de pesos en irregularidades, tan solo en aquella Región. Un alud informativo enterró el tema, antes de ser clarificado, y el cambio de estafeta contribuyó a que desapareciera de la opinión pública.
Pero el asunto es muy simple: meten el dinero a la licuadora de recursos, a fin de generar una mezcla turbia de fuentes de financiamiento que no deje ver qué contiene lo licuado ni en qué medida.
Actualmente no existe –como afirmó Blas Flores, titular actual de Finanzas- un fondo especial para resguardar los ingresos captados (El Siglo de Torreón, 30/04/18). Si el Gobierno del Estado no tiene voluntad política para diferenciar las partidas, y si no quiere crear un fideicomiso exclusivo para manejar el ISN, difícilmente formará un registro único de obra pública para identificarlas primero y dar seguimiento después.
Entonces todo se reduce a un acto de fe. Sin controles constitucionales ni contrapesos materiales.
VANGUARDIA informó que la Secretaría de Finanzas recaudó 864 millones de pesos de ISN de enero a abril del presente ejercicio fiscal (24/06/18). Al día de hoy, por simple proyección, la cifra ya superaría los mil millones de pesos.
¿A qué esperan?
CORTITA Y AL PIE
Por lo demás, la operación del ISN fue condicionada por el Gobernador, Miguel Riquelme, a la renegociación de la deuda. Primero ésta y después lo otro, cuando la relación entre un evento y otro es inexistente y podrían tratarse por separado.
Lo irónico es que a la fecha ni hay renegociación, ni existe cita para el arranque del Comité Técnico del ISN. Mientras tanto la administración estatal continúa en piloto automático y con el freno de mano puesto.
De la última década, ocho años han sido electorales en la entidad. Esa justificación para no actuar ya no vale.
LA ÚLTIMA Y NOS VAMOS
Estamos a tiempo. Los empresarios pueden cambiar la historia y exigir transparencia, o seguir sirviendo de tontos útiles al Gobierno del Estado en turno, como casi siempre. Cuestión de revisar quién tiene realmente la sartén por el mango.
@luiscarlosplata