Usted está aquí
Djokovic pone en duda su participación en el Abierto de Estados Unidos
Novak Djokovic tiene dudas de participar en el Abierto de Estados Unidos, que se realizará del 31 de agosto al 13 de septiembre, por el crecimiento de contagios en todo el mundo.
"Ahora no sé qué va a pasar. No le favorece al Abierto de EE.UU. lo que pasa en las últimas semanas, están creciendo mucho los números de contagiados (con la COVID-19), sobre todo en Nueva York", dijo Djokovic en una entrevista con el diario deportivo serbio Sportski zurnal.
Indicó que "muchos tenistas no saben si entrenar en tierra batida o en pista dura" y consideró que "se sabrá más antes del 15 de julio, plazo tope para que la ATP decida sobre las competiciones de su calendario, Washington, Cincinnati, los torneos europeos".
A su juicio, dependerá mucho de la situación de las conexiones entre Europa y Estados Unidos. "Hay mucha incertidumbre", declaró.
El tenista celebró "los esfuerzos en todo el mundo, sobre todo en Estados Unidos y en Europa, para que se celebren los torneos a pesar de la gran crisis sanitaria, económica, de seguridad", pero "todo tiene sus límites".
Su plan, en principio, es jugar Roland Garros, así como los torneos de Madrid y Roma.
Además afirmó que se sentía en una "cacería de brujas" por las constantes críticas por la organización del torneo en los Balcanes.
El propio Djokovic, el serbio Viktor Troicki, el búlgaro Grigor Dimitrov y el croata Borna Coric dieron positivo por el virus y el evento tuvo que ser suspendido.
Sin embargo, las imágenes de los tenistas en fiestas fueron los que detonaron las críticas al organizador.
El tenista declaró que su intención era "pura", organizar un torneo para recaudar fondos con fines humanitarios y para ayudar a los jugadores y federaciones regionales.
"Es obvio que hay algo más que la crítica, como si hubiera una agenda, una caza de brujas, que alguien tenga que caer, alguna personalidad, nombre conocido, que sea culpable de todo", denunció.