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A Djokovic no le tiemblan las manos, avanza en su debut en Wimbledon
LONDRES.- Se abrió el telón en Wimbledon. Y como es costumbre, el último campeón fue el primero en ver acción en la cancha central. El serbio, número uno del mundo, se impuso por 6-0, 7-6 (3) y 6-4 al británico James Ward, 177º del ranking mundial.
Sin jugar un gran partido, Novak Djokovic cumplió con la premisa: victoria en sets corridos. Con algunos pasajes de buen nivel, y otros tramos con algunas dudas, el serbio dio su primer paso en Wimbledon, donde busca convertirse en el primer jugador en la Era Abierta en ganar cinco torneos de Grand Slam de manera consecutiva.
El N°1 del mundo tuvo un inicio perfecto. Desde el comienzo, las claras diferencias. El serbio sacó provecho de las dos doble faltas de su oponente y firmó el primer quiebre. Acto seguido reaccionó ante un 0-40 con su servicio y golpeó en lo anímico a Ward con una segunda rotura. De ahí, directo al 6-0.
Djokovic siguió con su plan de juego sin problemas. Variantes en sus tiros, mucho uso del revés con slice y, además, una cuota de colaboración de Ward. No obstante, el británico pudo finalmente cerrar un game de servicio a su favor y soltó un poco su juego: quiebre y, un paso después, 3-3.
Djokovic pareció pasar el mal momento, al ponerse 4-3 y triple chance de break, pero su juego no estaba tan fino. Errores, algunos tiros cortos y la amenaza de Ward. La historia no fue sencilla, incluso llegó a tener tres puntos de quiebre en contra en el 5-5. No obstante, su mayor jerarquía le permitió abrirse paso hasta el tiebreak y establecer ahí la diferencia de dos sets.
Con el impuso de la ventaja, Djokovic firmó un veloz quiebre (para el 2-1) que empezó a sentenciar la historia. Sin jugar del todo bien, y dejando pasar una nueva oportunidad de quiebre en el quinto game, el serbio terminó cerrando el duelo en sets corridos. Tarea cumplida y boleto a segunda ronda, donde se medirá ante el francés Adrian Mannarino.
Cabe recordar que si el tenista de Belgrado gana su Major Nº13, quedaría a uno de Rafael Nadal (14) y a cuatro de Roger Federer (17). "Este año la situación es diferente porque vengo con el título de Roland Garros bajo el brazo por primera vez. Y eso es algo que me da mucha confianza", señaló. El cabeza de serie número uno señaló a Andy Murray y a Roger Federer, finalista el año pasado y siete veces ganador en 'La Catedral', como principales rivales por el titulo. "Primero de todo por su ránking, su historia y por haber ganado previamente este torneo".