Este miércoles en el Senado de la República, los morenistas Carlos Méndez y Susana Harp acusaron a la diseñadora francesa Isabel Marant de haber cometido apropiación cultural y plagio sobre ropa tradicional de la comunidad purépecha.

“La apropiación cultural consiste en el aprovechamiento patrimonial de una expresión cultural tradicional por parte de empresas, sin contar con autorización o hacer mención de su origen ni proporcionar compensación por su utilización. En este caso, la diseñadora Isabel Marant lanza una línea completa de ropa copiando, literalmente, patrones de diseños purépechas de artesanos de Charapan, Angahuan y Santa Clara del Cobre, de Michoacán”, enfatizó Méndez.

Por su parte, Harp recordó que no es la primera vez que Marant es señalada por plagiar diseños de comunidades indígenas de México; sin embargo, reconoció que las leyes internacionales en el tema no le son favorables, por lo que pidió ayuda de Marcelo Ebrard, Secretario de Relaciones Exteriores.

“En 2015 (Marant) decidió copiar de manera idéntica las blusas. El tipo de manga, la apertura en el cuello, los colores, eran idénticos. Ahora decidió tomar los colores, elementos que se encuentran de manera repetida en muchas de nuestras artesanías. Es la segunda vez que esta diseñadora, que así se nombra, hace apropiación cultural o plagio, entonces no puede decir que no sabía”, aseveró la morenista.

José Emmanuel Balboa, presidente municipal de Charapan, Michoacán, uno de los pueblos afectados, también estuvo en el Senado este miércoles y rechazó vehementemente lo hecho por Marant.

“(Por las pocas ventas, nuestros artesanos) están tirados a la calle (...) y ahora esta persona viene a dañar nuestra tradición. Están matando a nuestros artesanos, nos están desmembrando la piel porque esta artesanía es nuestra identidad”, enfatizó.

Varios mexicanos han acudido a la cuenta de Instagram de Marant para mostrar su rechazo ante esta situación, con comentarios donde aseguran que la francesa “no es una diseñadora, sólo plagia”.