México, DF. Tras descartar que hubiera sicarios infiltrados entre los estudiantes normalistas la noche del 26 de septiembre de 2014, el director de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, José Luis Hernández Rivera, estableció:

Yo lo descarto. Quieren difamar con esas deformaciones, implicar a la escuela. Es una institución académica que está fuera de la situación de los grupos delictuosos.”

En entrevista telefónica con Grupo Imagen Multimedia, el directivo escolar se refirió a las versiones periodísticas que lo vinculan con el narcotráfico a partir de las declaraciones ministeriales de tres de los detenidos del caso Iguala, integrantes del grupo delictivo Guerreros Unidos.

En dicho reporte se menciona que Hernández Rivera recibió de la organización delictiva Los Rojos 300 mil dólares, a cambio de transportar armas y sicarios en uno de los camiones en que viajaban los estudiantes normalistas.

"A nivel particular son muy independiente de eso. Mi trabajo no es de matar, sino de ser académico. Lo otro no estamos nosotros integrados. La misma Policía, las mismas autoridades, lo saben porque hemos sido vigilados”, dijo el director de la Normal Rural.

Añadió que “no hay pruebas” y que se trata de “testimonios ilógicos”, pues jamás aparecieron las armas referidas.

José Luis Hernández reiteró su negativa a haber recibido dinero, armas o algún otro tipo de beneficio de parte de algún grupo criminal.

“No tengo nada que ocultar (...) Dichos sin evidencias es falta de seriedad de parte de la prensa. La investigación de la Comisión Internacional no ha encontrado esa situación de lo que dicen esas gentes.

Hay manos muy extrañas que mandan a difamar y yo he tratado de estar imparcial como autoridad (académica). Eso sí, repruebo públicamente la atrocidad que se vio contra los jóvenes”, remató.

Dejó en claro que la lucha de los jóvenes son causas populares y no tienen que ver con actos delictuosos.