Diciembre les gustó para endeudarnos

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Diciembre les gustó para endeudarnos

Por enésima vez nos volvieron a endeudar. Me refiero, por supuesto, al Gobierno de Coahuila, quien luego de ser descubierto el fin de semana pasado no tuvo más remedio que revelar que sí pidió un crédito por 550 millones de pesos, el cual había ocultado a la opinión pública y especialmente al Poder Legislativo desde diciembre anterior.

Se trata de un préstamo “a corto plazo”, solicitado el 5 de diciembre al banco HSBC debido a “insuficiencias de liquidez de carácter temporal” para pagar “aguinaldos de burócratas y sindicalizados”, además de “bonos y gratificaciones al magisterio”, y conceptos indefinidos a la UAdeC, ITS, COBAC, CECYTEC, Universidad Tecnológica de Parras y el Instituto Tecnológico de Múzquiz.

Así lo explicó el 18 de febrero la Secretaría de Finanzas -a groso modo como acostumbra- a través de un comunicado de prensa. Luego sobrevinieron los tibios, predecibles, insustanciales y estériles reproches de la ‘oposición’, y finalmente fue borrado el asunto de la agenda pública sin que se conozcan siquiera las implicaciones económicas.

Sin embargo el tema merece algunas consideraciones.

De entrada, el contrato se inscribió hasta el 30 de enero en el Registro Público Único de Financiamientos y Obligaciones de Entidades Federativas y Municipios. Es decir, 50 días después de ser formalizado.

Y aquí viene lo interesante: el negocio supone una tasa de interés efectiva de 9.14 por ciento inicial a pagar en 12 meses de plazo. Pero la Tasa de Interés Interbancaria de Equilibrio (TIIE) del Banco de México fluctúa. En este momento se ubica alrededor de los 8.50 puntos aunque arrastra la tendencia a subir 25 unidades cada trimestre. Eso significa, haciendo una proyección, que para abril de 2019 se situaría en 8.75, a 9.00 en julio y 9.25 en octubre.

A ello habría que agregar 70 puntos base, como se convino en el documento con HSBC. La cifra final, por tanto, quedaría ya no en el 9.14 inicial sino 9.45, 9.70 y 9.95 respectivamente conforme avance el calendario.

Eso significa que, por 550 millones de capital que prestó HSBC al Gobierno del Estado, tendrá que desembolsar éste 304 millones 492 mil por concepto de intereses.

Recibimos 550 millones de pesos el 11 de diciembre de 2018, pero tendremos que devolver 854 millones 492 mil antes del 10 de diciembre de 2019, divididos en 12 pagos mensuales.

¿Tiene sentido endeudarse así?

Si bien el primer trimestre de 2018 el estado tenía prohibido contratar más deuda pública, pues el semáforo del Sistema de Alertas de la Secretaría de Hacienda estaba en rojo, a partir del segundo trimestre se puso en color amarillo, lo cual permitió volver al hábito de comprar dinero caro pese a que vivimos en la época con la tasa de interés más alta de la última década y, por consecuencia, no conviene pedir créditos. Para dimensionar: por cada peso prestado hay que pagar 1.55. Y eso que, según lo informado por Finanzas, se trató de la mejor opción posible. Las otras dos instituciones de crédito invitadas, Multiva y Banorte, dijeron que no, y proponían condiciones más onerosas que no fueron aceptadas en ese orden.

Se trata, en el fondo, de incapacidad para cumplir compromisos, desaseo, e irresponsabilidad en la gestión financiera.

¿Qué le hacen realmente al dinero?

Técnicamente, analizando los datos públicos, no había necesidad de un préstamo ya que por “asesorías” gastaron 716 millones de pesos más de lo presupuestado, en “subsidios” mil 360 millones extras, otros mil 036 millones de más en “ayudas sociales”, y 827 millones adicionales en “servicios personales”.

Tan sólo esos cuatro rubros suman tres mil 939 millones de pesos de sobre ejercicio. No salen las cuentas de Blas Flores, titular de Finanzas.

La razón es muy simple: utilizan la licuadora de recursos. Los mezclan hasta perderles la pista, de tal forma que no se sepa de dónde provienen, ni en dónde acaban. No es muy diferente lo que hacen ahora los actuales funcionarios, a lo que hacían en su momento Javier Villarreal o Jorge Torres.

CORTITA Y AL PIE

Todavía el 23 de febrero no estaba disponible en la web de la Secretaría –pese a ser obligatorio- el informe mensual de deuda pública bancaria directa correspondiente a enero del presente año. La última actualización, de diciembre 2018, señalaba un adeudo de 37 mil 102 millones 192 mil pesos, sin desglosar el monto por cada banco.

LA ÚLTIMA Y NOS VAMOS

Diciembre, por lo demás, es el mes que aprovechan el Ejecutivo y el Congreso para ejecutar uno, y votar otros, casos polémicos para la opinión pública de Coahuila.

Miguel Riquelme, por ejemplo, pidió mil millones de pesos en diciembre de 2017, y 550 millones en diciembre de 2018. A cuatro días de concluir la última Legislatura de mayoría priísta, en diciembre de 2017, ésta modificó su Ley Orgánica para bloquear la mayoría que la oposición tendría en lo sucesivo. Los nuevos diputados locales, en diciembre de 2018, se repartieron tres magistraturas en la opacidad: dos para el PRI, y una para el PAN.

Lo de siempre: actúan a escondidas, a espaldas del ciudadano, en contra del interés general.

@luiscarlosplata