Diario de un nihilista

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Diario de un nihilista

Cotidiana originalidad
Nos sorprendió Lenin Pérez,
sus dibujos animados:
así es en estos estados,
eres Pérez o no eres.

Ni en defensa propia
Marcha a las dos de la tarde:
somos un país de flojos;
así, estamos en hinojos
mientras el planeta arde.
 
La soberbia de los truhanes
Es fácil ser generoso
con fondos públicos. Hable
quien se ha vuelto miserable
dando lo suyo con gozo.

El gran dictador
Jugó a la silla más alta
–cual Hitler con Mussolini–
Donald Trump con Abe, el mini
premier del Japón. ¿Qué falta?

Defensa mimética
El águila protectora
de nuestro nacionalismo,
es la del proteccionismo:
somos como Trump ahora.

Unidad nacional
Los lemas envilecidos:
el llamado a la unidad
exhibe la seriedad
que se presta a los partidos.

Súbita decapitación
Sólo la espada de Isis
actúa con tanta eficacia:
con Luis Efrén no hubo gracia
y ni siquiera una crisis.

Proverbio árabe
Luis dijo, hijo de Said:
“El que quiera ser un pillo,
que sea más abusadillo.
Id pronto y esto decid”.

Los secretos de Rubén
Tiene tantos secretarios
privados, particulares
que en Palacio hacen sus lares
sin salario y sin horario.

Las dos asas de la Torah
Hollywood y el Holocausto
–el sueño y la pesadilla–:
bajo la sombra que brilla,
canturrea el silencio exhausto.

666
Lo anunciamos con modestia:
Trump está con Israel,
Netanyahu está con él.
Sepa ud. quién es la Bestia.

Dios en la tierra
¿Presidente? Bizantinas
apuestas. Carlos Slim
es, aunque no sea un muslim,
prestanombres de Salinas.