Gonzalo Alexander Marín Ricarde fue a meterse en problemas con los elementos del Grupo de Reacción Sureste, (GRS) por lanzar silbidos, cuando circulaban por las calles del fraccionamiento Urdiñola.

El acusado de 18 años de edad lo llevaron directo a las celdas municipales donde le imputaron el delito de amenazas de muerte.

Todo ocurrió la noche del pasado viernes, cuando los oficiales de la patrulla M1403 venían en circulación por prolongación Pérez Treviño.

Al ver a un grupo de jóvenes reunidos en el exterior de una casa encendieron la luz lateral e iluminaron directo a los integrantes de la supuesta reunión.

Tal parece que la luz los encandiló y Gonzálo lanzó un silbido directo a la policía.

Los oficiales lo interpretaron como insulto y tras proceder en tratar de someterlo junto con los amigos se dispersaron.

Solo privaron de la libertad a Gonzalo y según se opuso al arresto por que le causó molestia la luz que le echaron directo a los ojos.

El joven asegura que los policías no entendieron razones y lo sometieron fabricándose el delito de amenazas.

Aseguran que fueron amenazas ya que el joven durante el trayecto a la delegación les lanzó amenazas intimidatorias.

Ahora cumple el arresto por un plazo de 48 horas.