Riesgoso e intenso ha sido el trabajo de los Vigilantes de la Salud, desde que inició el Plan de Reactivación Económica en el sureste de Coahuila; se encargan de verificar que los establecimientos que reabrieron cumplan los protocolos sanitarios que estableció el Subcomité Técnico Regional COVID-19 Sureste.

Se trata de un grupo de 200 trabajadores del Municipio de Saltillo que, debidamente capacitado, se suma a la labor que realizan los inspectores de comercio, Protección Civil y Desarrollo Urbano.

Como consecuencia, se han emitido 2 mil 43 recomendaciones a propietarios o encargados de esos establecimientos, así como mil 613 notificaciones.

Asimismo, se tienen registrados casi 2 mil seguimientos a esos procedimientos y, ante la reiteración de incumplimiento, se han cerrado 42 negocios por parte de las autoridades correspondientes.

“Como parte de las acciones que hemos implementado en esta contingencia están los Vigilantes de la Salud, que cuidan a la población y trabajan todos los días, especialmente en los lugares donde se puede concentrar mayor número de personas”, destacó el alcalde Manolo Jiménez Salinas.

La labor que realizan los “Vigilantes de la Salud” es clave en el Plan de Reactivación Económica que está en marcha, por lo cual su labor continuará durante las siguientes fases.

El sábado anterior reabrieron los mercados al aire libre de Guayulera, Mirasierra, Saltillo 2000, Fuerza de la Mujer, Hacienda Narro y Tres Colonias, por lo que la labor de los “Vigilantes de la Salud” fue fundamental para que se diera esta reactivación económica sin incidencias.

La estrategia para hacer frente a esta contingencia sanitaria es clave la corresponsabilidad entre sociedad y Gobierno.

Más de 11 mil 100 visitas en establecimientos no esenciales que reanudaron actividades se han realizado desde el 18 de mayo, día en que comenzó esta labor de inspección hasta la fecha, según la Dirección de Desarrollo Urbano.