Misión cumplida don Salvador José Rodríguez. Esa fue la sentencia en que ésta mañana coincidieron familiares, amigos, empresarios y demás personas que tuvieron la oportunidad de conocer a quien fuera uno de los primeros impulsores del Saltillo que hoy conocemos.

Don Salvador falleció la madrugada de hoy, sólo 9 días después de festejar sus 100 años de edad, el pasado 28 de enero.

Cientos de personas se congregaron en las Capillas Renacimiento para darle el último adiós a don Salvador.

Don Salvador José Rodríguez y su esposa Yolanda Hochmann de José (QEPD) procrearon a seis hijos: Alejandro, Alberto, Enrique (QEPD),  Salvador, Antonio  y Eduardo José Hochmann.

Las pláticas y anécdotas de quienes conocieron a la familia José Hochmann se escucharon  frecuentemente en la capilla, llenando de un aire de nostalgia el lugar.

“Tuve la fortuna de conocer a don Salvador porque sus hijos y yo éramos vecinos desde que yo tenía 14 años. Creo que fue un ciudadano y empresario ejemplar.

Siempre he pensado que los que viven tanto tiempo, aparte de tener buena genética, tienen que ser muy inteligentes y efectivamente él era un hombre muy inteligente”, expresó el empresario saltillense Francisco Javier Duarte.

Evocó los años en los que junto con los “seis hermanos José” se iban caminando a la escuela.

Don Salvador nació el 28 de enero de 1918,  en Cedral, San Luis Potosí, un pueblito cerca de Matehuala. Era descendiente de padre libanés y madre mexicana, recordó su hijo Eduardo José Hochmann.

Desde muy temprano se trasladó a Saltillo, donde se dedicó a la fabricación y confección de ropa, textiles, mezclilla  y llegó a tener una fábrica importante, añadió.

Dijo que luego, en sociedad con sus hermanos Antonio  y Salomón se dedicó al ramo mueblero, fundando “Muebles Modernos”, en Allende y Múzquiz, que luego se cambió a Hidalgo y Aldama, de la cual se desprendieron luego varios negocios, como la actual Mueblería José, propiedad de su tío Salomón.

“Lo vamos a recordar como un hombre con  una inteligencia profunda y con un sentido de la honradez y del deber muy, muy alto”, apuntó José Hochmann.

“Mi hermano cumplió con la familia, a mí me enseñó mucho”, expresó Salomón José Rodríguez, hermano de Don Salvador.

“Es 15 años mayor que yo, lamento mucho su partida, era muy estimado, muy trabajador, siempre fue un  hombre muy correcto”, expresó don Salomón, de 85 años de edad.

UN HOMBRE CORRECTO, DE TRABAJO Y QUE DEJA UN GRAN LEGADO

“Mi padre le deja a la sociedad un ejemplo de trabajo,  honestidad, seriedad y preocupación por la sociedad”.

Eduardo José Hochmann

Fue un ciudadano y empresario ejemplar. Siempre he pensado que los que viven tanto tiempo, aparte de tener buena genética, tienen que ser muy inteligentes y efectivamente él era un hombre muy inteligente”.

 Francisco Javier Duarte Villegas, empresario

“Se va todo un personaje, toda una época de personas de muy alto nivel moral, es un personaje distintivo en Saltillo, que formó una gran familia, un hombre de esfuerzo, deja todo un legado”.

Ciro López Dávila, académico

“El señor Salvador José deja un legado muy importante para sus hijos, para todos sus descendientes y para todos los saltillenses que tuvimos el privilegio de conocerlo, una gran persona”.

Alejandro Valdés, empresario restaurantero

“Misión cumplida del señor, dejó mucho trabajo, muchas fuentes de empleo… el señor ya cumplió, nos deja un gran legado, mucho trabajo por muchos años, nos deja una gran familia”

Jorge César González, empresario de comunicaciones

“Es muy lamentable que don Salvador nos haya dejado, era un apersona que se dedicó al trabajo y a su familia. Fue una persona que toda su vida fue muy correcto y es una pérdida muy lamentable para el activo de la ciudadanía”

Kerim Saade Charur, empresario