ARTEAGA.- La pequeña Nayeli, quien murió el domingo al ser aplastada por un molino de maíz que tiene su padre en su casa, fue regresada al lugar donde sus familiares y vecinos del ejido Los Llanos le hicieron su velación para darle el último adiós.

Los abuelos y tíos están consternados por el accidente y señalaron que hablar de la vida de la menor nada va remediar, ni a revivirla; entre llanto expresaron que fue un accidente y en esto no hay culpables.

“Fue un accidente y en esto no hay ningún culpable, hablarle de la niña (Nayeli) no va remediar nada, ahorita lo que pido es que la dejen descansar”, fueron las expresiones a los reporteros de este medio informativo.

Mientras le menor era velada en el interior de su casa, el molino de maíz que le cayó encima aún lucía tirado junto con la hamaca y según la familia no se ha movido absolutamente nada, esperando a que la autoridad fije lo que pasó.

A simple vista se puede observar que la red en color negro con blanco fue atada en el tronco de un árbol y el otro extremo a la base del molino, que tiene una medida aproximada de un metro de altura, y sus patas no estaban sujetas al piso o enterradas.

Se presume que cuando las niñas Nayeli, de 6 años, Fernanda, de 4 años y Paula, de 6, se columpiaban, el molino no soportó el peso y cayó encima de las tres menores a las cuales dejó heridas.

Ante lo sucedido los padres de la pequeña Nayeli de inmediato acudieron a auxiliar a las niñas y a todas las abordaron a un vehículo Nissan Sentra y las llevarón rumbo a Arteaga con la finalidad de interceptar a una ambulancia.

Los papás, Paloma Rueda Gómez y Omar Lizcano Núñez, condujeron hasta la Comandancia de la Policía Municipal de Arteaga, donde pidieron auxilio, pero al ser analizadas por personal de Protección Civil sólo confirmaron la muerte de Nayeli.

Las otras dos niñas presentaban contusiones y se les trasladó al Hospital del Niño, donde horas más tarde fueron dadas de alta.