Hola, no sé cómo empezar. Nunca he escrito antes para pedir una opinión... Pero esta vez realmente lo necesitaba. Quizá para ver otro punto de vista, o tener aquel consejo del que ahora carezco.

Llevo ya dos años con mi pareja. Mi relación nunca ha tenido problemas serios, con esto quiero decir que hemos tenido nuestras discusiones (como cualquier otra relación) pero todas ellas nunca han llegado a más.. Siempre hemos sabido solucionarlas y entendernos.

Desde hace unos meses todo ha dado un giro muy drástico. Discuto con mi pareja varias veces en una sola semana, siento que se está perdiendo el respeto entre ambos (jamás ha habido malas palabras o insultos pero sí comportamientos dañinos y tóxicos),y no sólo eso.. Cada vez con más frecuencia me deja sola horas o días enteros después de un enfrentamiento, no quiere saber de mí y dice que mi simple voz es la que le hace perder los nervios. Me ha llegado a poner condiciones para seguir juntos, condiciones tales como “hay ciertos temas de los que no puedes hablar o te dejo”, muchas veces (tantas que ya no puedo ni contar cuentas) dice algo que me hiere, ya sea una expresión, una frase con un tono ofensivo... y cuando le repito esa misma frase advirtiéndole de que no aguantaré escuchar algo así más, me dice que él no dijo eso en ningún momento.. Al principio pensé que era yo la que me equivocaba. Que sería una falta de atención por mi parte. Pero han sido ya demasiadas y empiezo a dudar de que eso sea así.. Siempre he sido una mujer atenta, y jamás me ha pasado esto.

Siento que me estoy volviendo loca. Lo quiero muchísimo pero empiezo a sentir que me ahogo en esta situación.

Desorientada

Estimada Desorientada,

Por lo que cuentas parece que la situación se fue poniendo mal poco a poco, porque una relación no se va a pique de un día a otro. A lo mejor antes no notaste las señales y ahora sí.

Deben tomar en cuenta las probables causas de que esa situación por la que atraviesan esté sucediendo, la economía, nuevas amistades nocivas de uno de los dos, cambios de hábitos, que uno de los dos empiece a beber o a consumir otras sustancias, que uno de los dos conozca a otra persona que le atraiga. Analiza a qué se puede deber y propicia un momento para hablar con tranquilidad con tu novio para que cada uno exponga su punto de vista. Si al final decides cortar por lo sano, será porque ya tomaste en cuenta tanto tu análisis de la situación como los argumentos de él.

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