Luego del enfrentamiento entre policías y civiles armados que dejó sin vida a nueve presuntos integrantes de una célula del crimen organizado, la seguridad fue reforzada en Saltillo.

La vigilancia preventiva fue uno de los acuerdos a los que se llegó en la reunión de urgencia convocada el sábado, tras el enfrentamiento a balazos en la colonia Loma Linda, donde también se reportaron dos policías heridos.

Desde el mismo sábado y ayer domingo, un helicóptero del Gobierno del Estado sobrevoló la ciudad en acciones de seguridad preventiva, sobre todo en la zona oriente, donde se registró el tiroteo.

Mientras tanto, el último parte médico sobre el estado de salud del agente del Grupo de Reacción Sureste (GRS) lesionado durante los hechos violentos en Loma Linda, apunta a que se encuentra recuperándose satisfactoriamente en un hospital del norte de la ciudad.

El domicilio donde ocurrió el enfrentamiento permanece bajo resguardo y asegurado por las autoridades.

Por su parte, el empresario Héctor Horacio Dávila consideró que la autoridad debe de seguir trabajando para mantener a la ciudad y a la entidad como lugares seguros.

“Ellos (autoridades) no controlan todas las variables y nunca las vamos a controlar... lo que sí debemos de hacer es organizarnos para que no sucedan las cosas; las inversiones van a seguir, esas no se paran por un evento, lo que sí debemos de hacer es de que todos estemos ayudando de que no entren ese tipo de cosas, que no se hagan repetitivas”, añadió.

Dávila Rodríguez dijo que, por ejemplo, no funciona el botón de pánico; tampoco el número de emergencias 911.

“Que no nos digan que está funcionando, si no está funcionando”, expresó el empresario local.