Descubre las maravillas de Campeche con estas rutas

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Descubre las maravillas de Campeche con estas rutas

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Conoce las mejores haciendas y hasta una isla rodeada de flamencos

Haber salvado a la ciudad de Campeche de la invasión pirata, en 1704, tuvo su recompensa: los vestigios de baluartes, troneras y murallas que se construyeron para proteger a los pobladores son parte de los tesoros históricos que se tomaron en cuenta para que la Unesco le otorgara la declaratoria como Patrimonio de la Humanidad, el siglo pasado.

Hoy, es posible caminar por esos antiguos puntos de vigilancia a través de la Ruta de los Baluartes, que te lleva por toda la zona amurallada que fue edificada en forma de hexágono y en la que cada ángulo, estaba protegido por un baluarte.

 La caminata inicia en Puerta de Tierra, el antiguo acceso principal a la ciudad. Aquí se exhibe un cañón de bronce que fue rescatado de las aguas cercanas a Campeche. También, está permitido caminar sobre los restos de la muralla hasta llegar al Baluarte de San Juan.

Por las noches, los fines de semana se proyecta un espectáculo de luz y sonido sobre el muro de la Puerta de Tierra, para recordar los antiguos ataques piratas.

Siguiendo la ruta, llegas al Baluarte de San Francisco. En su interior se narra la forma de vivir de los piratas. Más adelante, en Santa Rosa, debes entrar a su pinacoteca para encomendarte a Santa Rosa de Lima, la patrona a la que los pobladores le pedían su protección durante los ataques furtivos de la ciudad. Otros recintos que forman parte de la ruta son: el Baluarte de San Carlos, con vista al mar, ahora transformado en el museo de la ciudad; y, el Baluarte de Nuestra Señora de la Soledad, que a su interior resguarda vestigios de arquitectura maya.

Ruta de los baluartes. El recorrido guiado dura dos horas. / Tomadas de Internet

El recorrido guiado dura dos horas. Puedes contratar los servicios de un guía de turismo en: www.campeche.travel

Isla Arena, paraíso en color rosa
El destino final de este viaje carretero por la costera del golfo, es una isla habitada por flamencos rosados, ubicada a dos horas de distancia de la ciudad de Campeche. Pero, para llegar a ella, primero hay que ir a algunos poblados como Hecelchakán.

Los pobladores permiten a los viajeros entrar a sus casas para comer cochinita pibil, que a diferencia de Yucatán, es menos acidita por no contener tanto achiote y, además, se cocina en un horno bajo tierra.

La carretera federal del golfo también cruza por la ciudad de Calkiní, famosa por sus dos antiguas haciendas henequeneras -Santa Cruz y Tancuché- y por la elaboración de sombreros de jipijapa, pues el accesorio no es exclusivo del pueblo de Becal.

Aprovecha la escala para comprar molinillos de chocolate, tallados a mano en madera.

De aquí, te vas directo a Isla Arena, un pequeño estero que forma parte de la Reserva de la Biosfera Ría Celestún, en su lado campechano, y que era el sitio de descanso de Pedro Infante. Por lo mismo, los pobladores construyeron un museo en su honor.

El principal atractivo de Isla Arena son los recorridos en lancha para observar un grupo residente de flamencos rosados, que junto a las ruinas de una antigua hacienda salinera, pintan de rosa las aguas del estero.

En Isla Arena encuentras cabañitas rústicas para pernoctar un fin de semana.

Del palo de tinte al henequén
A 30 minutos de la ciudad de Campeche, al norte, se esconde la historia de la tinta que los antiguos mayas utilizaban para teñir su vestimenta, al que llamaban ek' y que nosotros conocemos como palo de tinte.