Un panorama casi de moderna explotación en contra de los médicos residentes de los hospitales públicos, a quienes se les hace trabajar hasta 36 horas continuas, describió la diputada federal Silvia Garza Galván en la tribuna de la Cámara de Diputados.

Explicó que los médicos residentes apenas han empezado a recibir el pago de su apoyo económico, que en realidad debería ser un salario, porque los médicos no son reconocidos todavía como trabajadores del sistema de salud.

Silvia Garza denunció que ni la Ley Federal del Trabajo, ni la Ley General de Salud, reconoce a los médicos residentes de los hospitales como trabajadores, por lo cual presentó junto con el grupo parlamentario del PAN en la Cámara de Diputados una iniciativa de reforma.

“Sufren las injusticias, el estrés laboral, el estrés psicológico, el estrés físico. Tenemos que darles la seguridad y resolver el tema de fondo. Ya no más mejoralitos”, explicó.

La misma problemática la viven los médicos de pregrado, los médicos en proceso de residencias y aquellos que solo están haciendo prácticas.

“Necesitamos cumplirles a estos mexicanos que tenemos abandonados, que los estresamos y ponemos en riesgo su salud. Incluso ha aumentado el número de suicidios y nosotros permanecidos inmóviles. Apenas reaccionamos ante la presión de una marcha para que les pagaran”, señaló.

Pidió que los médicos residentes tengan un horario, porque no es justo que laboren más de 36 horas continuas y estén un estrés psicológico fuerte.

Denunció que en la Comisión de Salud, primero no se convocó a la reunión para tocar el tema de los médicos residentes, pero además no se dictaminó y la iniciativa estuvo a punto de desecharse.

Describió el trabajo de los médicos residentes en hospitales como una esclavitud moderna, porque laboran mucho tiempo, ganan poco y llevan un estrés bastante fuerte.