Vecinos del Fraccionamiento Magnolias II manifiestan su enojo ante el abuso que, dicen, cometieron los habitantes de Fátima, fraccionamiento aledaño, pues el 25 de mayo derribaron una barda que separaba a ambos sectores habitacionales.

La acción, según los afectados, se llevó a cabo sin ningún permiso de las autoridades municipales. 
Ana Luisa Pérez, vecina del fraccionamiento Magnolias II, declaró que el presidente del fraccionamiento Fátima, Fernando García, aseguró que tenía un permiso para tumbar la barda, pero al verificarlo, los vecinos se dieron cuenta de que esto no era cierto y que llevaron a cabo estas acciones de manera arbitraria. 

“Tiraron la barda arbitrariamente, no tenían permiso de hacerlo, la molestia es que lo hicieran de esa manera y que además ahora no hay un plan de señalización porque la calle era cerrada y ellos vienen y van, puede ocurrir un accidente, lo que queremos es que se haga algo al respecto, que se pongan bordos, bollas y señalización”, dijo Ana Luisa Pérez.

Los vecinos de Magnolias II ya pusieron una denuncia ante las autoridades de Desarrollo Urbano del Municipio, para que tomen cartas en el asunto. 

Como protesta, colocaron una manta donde manifiestan su inconformidad ante lo hecho por los vecinos del fraccionamiento Fátima.

¿Legales los fraccionamientos cerrados?

En octubre de 2015, el Ayuntamiento de Saltillo anunció la creación de un reglamento específico que norme el desarrollo de fraccionamientos cerrados, entre sus especificaciones condiciona que el ingreso a estos lugares no podrá negarse.

El 18 de enero de 2016 se dio a conocer que el Reglamento de Desarrollo Urbano en materia de fraccionamientos con accesos controlados, finalmente quedó sólo en una reforma y la adición de un artículo más al ya existente de Desarrollo Urbano y Construcciones.