Más de 100 familias de la Región Sureste de Coahuila han sufrido un martirio para conseguir terapias para sus hijos con espectro autista, pues el Centro de Rehabilitación y Educación Especial disminuyó el espacio de atención y redujo el padrón de beneficiarios.

Fue desde julio de 2017 cuando se abrió un espacio completamente remodelado en donde un equipo de especialistas atendía a niños y adolescentes con autismo grado 1 y 2 y se ofrecían terapias físicas y ocupacionales, incluso había simuladores para la terapia conductual, comentó Andrea Rueda, presidenta de Familias Unidas por el Autismo en Saltillo.

“Tenían dos cubículos para psicólogas, área para cosas manuales y áreas para que empezarán a ser independientes; estuvo operando un año y medio y sin más desapareció, empezaron a dar de alta a muchos niños”, dijo Rueda.

Actualmente, esta área solo consta de un cubículo en donde no hay especialistas para los jovencitos, pues según Rueda ni siquiera se ponen de acuerdo en que tipo de servicios se siguen brindando.

La lista de espera crece cada año, pues el CREE sí ofrece servicios de diagnóstico en cerca de dos mil pesos; sin embargo, las detecciones quedan sin atención inmediata pues hay 80 solicitudes en “stand by”.

“Que se organicen y nos digan si van a seguir atendiéndonos o no, hay familias de muy bajos recursos que gastan hasta 3 mil pesos mensuales en terapias de centros privados, porque el Estado no tiene interés en ayudarnos”, refirió.

Piden inclusión para niños autistas en Coahuila

Este 2 de abril es Día Mundial de la Concientización sobre el Autismo y lo único que piden las familias con hijos de diagnóstico positivo, es que puedan tener acceso a educación y a una escuela en donde sean incluidos.

Diego fue diagnosticado con autismo a los 2 años, hoy a sus siete años, ya cursa el primer año de primaria en la Casa Hogar San José, del sistema Lasallista, un colegio particular, el único en donde le abrieron las puertas.

La señora Andrea Rueda, madre de Diego, aseguró que el sistema de educación pública y privada no tiene la capacidad para recibir a niños con autismo “lo cierto es que los maestros no quieren capacitarse por que en la secretaria si hay cursos, pero no quieren atendernos”.

Su viacrucis inició desde que buscaban un kínder para Diego, al menos cuatro instituciones, públicas y privadas, les negaron la educación por diferentes excusas, desde la falta de maestros hasta discursos que aluden a la discriminación.

La opción que tienen los niños con algún grado de espectro autista, es acudir a los Centros de Atención Múltiple, en donde atienden diferentes discapacidades motrices e intelectuales, sin embargo, la señora Andrea aseguró que lo ideal para un niño autista es acudir a una escuela regular para tratar el tema de la falta de sociabilización.

“Nosotros no pedimos que los atiendan de forma especial pero sí que los incluyan con alguna estrategia, porque nuestros hijos son visuales, aprenden observando y está comprobado que lo adecuado es que vayan a una escuela normal”, señaló.