Luego de ir a recoger a su hija de un año y 10 meses a una guardería, María del Carmen Ramos le detectó 10 mordidas a la menor de nombre Valentina, que padece Síndrome de Down

La madre de familia relató que el 13 de junio, al acudir a la estancia infantil Yupi, se encontró con esta situación por lo que demandó por agresión a los responsables del establecimiento, que al parecer recibe apoyos de la Sedesol.

Ramos señala que ya interpuso una denuncia ante la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia, sin embargo, ahí le recomendaron también proceder legalmente ante la Procuraduría de Justicia del Estado.

Aunque la señora Ramos Valdez muestra fotografías de las heridas de su hija, tiene conocimiento que Perla Siller Flores, propietaria de la estancia, acudió a la Pronnif para negar los hechos.

Asegura que incluso presentó un video, al cual no ha tenido acceso la madre de familia. Además la mujer tiene la sospecha de que la Sedesol busca encubrir el caso.  

Los hechos
María del Carmen relató que al notar que personal de la guardería tardaba en entregarle a su hija, cruzó el filtro y dice vió a una cuidadora al tanto de buen número de niños. Minutos después le entregaron a su hija y le comentaron que había sido mordida por un compañero.

“Me dicen que es un niño nuevo que la mordió y también a otras dos niñas, que no se dieron cuenta porque la niña no lloró. Pero yo la vi demasiado lastimada, se las pedí para revisarla y trae mordidas en la espalda, piernas, brazos, más de 10”.

La madre de Valentina señaló que la niña cuenta con seguro de gastos médicos y por esa parte no hubo ningún problema, sin embargo muestra su inconformidad ante la falta de cuidado de parte del personal de la estancia, además de que ante la autoridad negaron los hechos.

Según comentó la señora Ramos, esta guardería tiene ciertas certificaciones que les permite recibir a niños con discapacidad, sin embargo, desde que tuvo esta experiencia duda que los pequeños estén en buenas manos.