Gabriel Espinoza González, trabajador de una gasolinera en Saltillo, interpuso el día de ayer una queja contra la unidad 0282 de Fuerza Coahuila, luego de haber sido supuestamente golpeado por los policías el fin de semana. 

El trabajador asegura que fue trasladado la mañana del domingo a la Comandancia Municipal, luego de que los elementos de Fuerza Coahuila lo detuvieran, argumentando que se encontraba ingiriendo bebidas alcohólicas en la calle, aunque esta versión no pudo ser subsanada por los médicos del Ministerio Público ni por los de la Policía Municipal. 

Aseguró que a pesar de no presentar ningún síntoma de haber bebido y lograr comprobar que había sido sacado de su horario de trabajo, la multa impuesta en su contra fue por “aliento alcohólico”.

Espinoza González narró que después de pasar una hora en la Comandancia Municipal, fue trasladado a las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del Estado, donde se le sumaron otras faltas por “resistirse a la autoridad”; sin embargo, asegura que tampoco tuvieron pruebas de ello, y esto se debió a que uno de sus compañeros no quiso dar una cuota de 4 mil pesos que fue solicitada por los elementos de seguridad como “mordida”.

El afectado, agregó que dentro de su estancia en la Procuraduría fue golpeado fuertemente y amenazado por los miembros que habían hecho su detención, provocando fuertes lesiones en las piernas, en su brazo izquierdo y en dos de sus dedos. 

“Donde te veamos, te vamos a agarrar otra vez”, asegura que le dijeron.

Dijo que luego de haber sido soltado, su cartera fue regresada sin 3 mil 500 pesos  y tuvo que ser pagada una multa aparte de más de 4 mil pesos.

Por último y después de buscar interponer su queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos, agregó que buscará que las autoridades muestren los videos generados en su circuito cerrado, donde podrá probarse que existen abusos sin argumentación por parte de los elementos de Fuerza Coahuila y las otras corporaciones de seguridad en el Estado.