CIUDAD DE MÉXICO.- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) advirtió sobre la "militarización" del Instituto Nacional de Migración (INM), ya que en 19 estados de la República se han designado a personas con perfil castrense para que se encarguen de las oficinas y/o representaciones de esa dependencia.

A través de un pronunciamiento, que también firmaron refugios para migrantes, la CNDH dijo que las entidades federativas donde ha ocurrido esto son Aguascalientes, Campeche, Chihuahua, Coahuila, Colima, Estado de México, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Nayarit, Puebla, Sinaloa, Sonora, Veracruz, Chiapas y Yucatán.

"La CNDH, de manera conjunta con diversas organizaciones de la sociedad civil, albergues y casas de migrantes en México, se pronuncian enérgicamente en contra de decisiones tendentes a militarizar el INM.

"Sin menoscabo de los méritos militares que pudieran tener las personas nombradas, la conducción de las representaciones del Instituto Nacional de Migración en las entidades federativas del país, debe encausarse hacia una perspectiva de Derechos Humanos y de Derecho Internacional Humanitario, más que de seguridad", señaló el organismo.

Recordó que México es un país de origen y tránsito en la migración, por lo que las personas que atienden a los extranjeros deben ser empáticas, sensibles y con un rostro humano.

La CNDH también acusó que la comunicación entre el INM y los refugios administrados por la sociedad civil se ha roto, por lo que hizo un llamado a la Secretaría de Gobernación (Segob), la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) y al mismo instituto migratorio para que se resuelvan todos estos sucesos.

"Expresamos nuestra preocupación por la falta de claridad en la conducción de la política migratoria y, por las diversas violaciones a derechos humanos de las que son objeto un sin número de migrantes en movilidad por nuestro país", aseveró el organismo.

El pasado mes de octubre la CNDH emitió su primera Recomendación a la Guardia Nacional, institución a la que acusó de apedrear y golpear a los integrantes de una caravana migrante que llegaron a México a principios del 2020.