Delinquieron 163 menores en 2020; 42% menos que 2019

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Delinquieron 163 menores en 2020; 42% menos que 2019

Impacto. La delincuencia alcanzó a poco más de mil adolescentes y jóvenes durante los últimos tres años en la entidad. ARCHIVO
Desde riñas callejeras y robos simples a crimen organizado son cometidos por niños y adolescentes

Delitos como el robo simple y en su modalidad agravante, daño a propiedad ajena, portación prohibida de armas, posesión de narcóticos con fines de comercio o suministro, son algunos de los delitos más frecuentes por los que han sido detenidos.

De acuerdo a una solicitud de información, la Fiscalía General del Estado documentó durante el 2020 la detención de 163 menores de edad entre los 13 y 17 años al cometer un ilícito, la mayoría por robo simple, posesión de narcóticos o graffiti.

Esta cifra disminuyó considerablemente durante el año en que inició la pandemia, sin embargo, la cifra del 2019, reporta 380 jóvenes detenidos en la entidad y 487 durante el 2018, sumando mil 30 adolescentes y jóvenes que cometieron algún ilícito para luego ser detenidos por la policía.

LA VARIEDAD DE DELITOS

Entre los delitos cometidos también se encuentra el robo calificado, conducción de vehículos en estado de ebriedad o bajo influjo de narcóticos, lesiones atenuadas por riña, robo calificado a centros educativos, allanamiento de morada, violencia familiar y extorsión simple.

Así como amenazas, fraude, desmantelamiento de vehículos y lesiones graves.

Pese a los muchos programas que implementan las autoridades para la prevención del delito o disolución de células criminales que reclutan jóvenes como su carnada, se siguen sumando los menores a las fila de la delincuencia.

HAY LOS QUE APROVECHAN APOYO

Aunque algunos de los adolescentes ingresaron al Centro de Internamiento Especializado en Adolescentes Femenil o Varonil de Saltillo, también se registraron casos de jóvenes que revelaron situaciones como violencia intrafamiliar, frustración y nexos con la delincuencia organizada, aunque lograron saldar su deuda con la ley.

Tras su internamiento dejaron la culpa, angustia, miedo y fracasos y se alejaron de los intentos de muerte, enojos, dolor, amores prohibidos y amigos tóxicos para comenzar de nuevo.

Quienes así lo informaron fueron integrantes del Ministerio Público, que canalizan a los jóvenes a programas que impulsa el gobierno para la prevención del delito.

En estos espacios es donde los jóvenes son recibidos en talleres artísticos o agrupaciones deportivas para canalizar la energía, así como recibir acompañamiento y atención psicológica.