Cuando Fernando del Paso perdió la voz debido a una serie de infartos cerebrales, su doctora lo puso a leer en voz alta su novela "Noticias del imperio", desde la primera hasta la última página. Así fue como a los 80 años reaprendió a hablar con sus propias palabras.

El mundo literario hispanoamericano escuchó con atención al ganador del Premio Cervantes, que ahora tiene dificultad para hablar. "Esta no es mi voz", aclara con un poco de pena el que fuera la voz en español de la BBC y quien de joven se ganara la vida como publicista.

Del Paso ofreció una rueda de prensa ayer en Guadalajara, la ciudad donde vive desde hace 22 años, y dedicó unos minutos para hablar de historia, de la palabra y de dos de sus novelas.

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"Hoy soy un aspirante a historiador. Cuando iniciaba era un aspirante a novelista. Con 'Noticias del Imperio', el contenido del libro no es lo que yo quería enseñar, sino lo que yo quería aprender", dijo.

Esta novela, en la que dedica sentidas páginas a la emperatriz Carlota de México, es la que le ha dado más fama. Sin embargo, a él le gusta más "Palinuro de México".

"La primera es la que me dio fama, pero a mí me gusta Palinuro... Es una autobiografía inventada; uno es la vida que tiene y otra la que quieres vivir", manifestó Del Paso.

"Soy un enamorado de la historia de México y del mundo. He jugado con el papel de la tortuga y la imaginación; las pongo a competir. Y la tortuga gana. Pero ya no lo voy a hacer", agregó.

El escritor anunció que, próximamente, saldrá a la venta un libro suyo llamado "Bajo la sombra de la historia", que engloba una serie de ensayos sobre las religiones, a las que ha criticado, en especial al Islam, al que consideró un "problema".

"La base del entendimiento es el respeto absoluto a lo que piensen los demás. Por eso pienso que el Islam es un problema, porque es muy agresivo. Y lo mismo denunciamos la agresividad que manifiestan distintas religiones, como la misma iglesia católica en otros tiempos", sostuvo.

Del Paso habló también sobre la situación de México, donde todavía "hay que hacer mucho", señaló. "Hay 50 millones de pobres o empobrecidos, con salarios mínimos, que son víctimas de la corrupción".

Sin embargo, aseguró que se encuentra feliz. "Mi estado de ánimo es magnífico pese a la enfermedad de tres años y a que México no se ha compuesto, se sigue desmoronando", dijo el escritor, quien a pesar de todos esos problemas, consideró que el arte todo lo puede transformar, "incluso la ira y el delirio".

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La editorial Fondo de Cultura Económica celebró hace poco los 80 años de Del Paso. Ahora, con el Premio Cervantes, la celebración adquiere mayor relevancia. Varios de sus libros se han reeditado y habrá un festejo durante la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, el 28 de noviembre.

"Amo España, el español nos fue impuesto pero ahora nos pertenece al mismo grado que a los españoles. Somos los encargados de enriquecerlo. Me halaga el Cervantes. Me llena de orgullo", dijo sobre el premio y precisó que, pese a su enfermedad, desea estar presente en la entrega el próximo 23 de abril.

El escritor indicó que con el dinero del premio comprará su boleto y el de toda su familia para que lo acompañen en el que será, seguramente, "el máximo premio que recibirá en su vida".