Su salida fue intempestiva, para muchos, irracional. Kieran Lister terminó con su novia Beth, la chica con la que había pasado momentos maravillosos en dos años de relación. “No sé qué más hacer”.

Kieran no culpó a la joven de la ruptura, quien decidió terminar con él, pero escribió que no podía afrontar la situación al estar sin su "amor". Ella lo era todo.

"No quiero esperar a superar esta situación porque ella es la única que me ha hecho realmente feliz", señaló el joven residente de West Yorkshire, en Reino Unido.

Se dijo consciente de que no estaban hechos el uno para el otro y a ello habría correspondido él, seguramente a lo largo de la relación.

Pidió que le interpretaran una canción de la cinta de El Rey León, como un deseo por los buenos momentos.

Hizo una petición para que alguien cuidara del fiel Snoop, el perro con el que aparece junto a él en algunas de las fotos de su perfil de Facebook.

Sobre los bienes materiales: Su departamento y su automóvil, pidió le fueran entregados a Beth, además, de hacerse cargo de su cuenta bancaria, la cual junto con lo que sacará de la venta de sus prendas, le ayudarían a cubrir lo del piso.

"Una vez que tengas el suficiente dinero para mudarte, asegúrate de que lo haces con alguien que te cuide", le sugirió.

Entre el listado de deseos. Sugirió donar los muebles que poseía y que recogiera los regalos de Navidad que ya tenía.

"Pido perdón a todos los que he herido, decepcionado o entristecido en general. Si pudiera, conseguiría que todo el mundo me perdonara, pero no soy Dios. Todavía. No creo en Dios, sólo estoy imaginado a alguien poderoso, que es indestructible. Ojalá lo fuera", señaló.

El adiós llegó, horas después fue hallado muerto.